PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura


Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

OPINIÓN - JUEVES, 5 DE OCTUBRE DE 2006

 

OPINIÓN / EL OASIS

La visita de ZP
 


Manolo De la Torre
manolodelatorre@elpueblodeceuta.com
 

Alguien dijo que la política es como patinar sobre ruedas. Se va en parte a donde se desea, y en parte a donde le llevan a uno esos malditos patines. Me gustaría, pues, preguntarle a Zapatero cuál ha sido su caso en lo tocante a visitar Ceuta y Melilla. Así empezaba yo esta columna cuando arribó a Ceuta el presidente del Gobierno. Luego, después de considerar la visita de crucial, aclaraba lo siguiente: La importancia de la visita de ZP tiene más valor por el hecho de que ni González ni Aznar pusieron sus pies, siendo presidentes, en esta ciudad. De no haber sido así, ver a ZP pasear por nuestras calles habría sido algo normal. Tan normal como cuando lo vemos por televisión dándose un garbeo por Logroño, Teruel, Sevilla, etc.

No cabe la menor duda de que los patines que trajeron a Ceuta al presidente fueron los hechos graves ocurridos en la valla fronteriza y, cómo no, su metedura de pata en la cumbre Hispano-Marroquí, celebrada en Sevilla. Aquel silencio ante el ministro marroquí y el trago de agua para poder digerir su error, lo comprometieron de manera que la única salida fue echarse para adelante y anunciar en el Senado, durante el debate del Estado de las Autonomías, que, nada más comenzar el año, viajaría a Ceuta y Melilla. Cierto es que tal anuncio sorprendió a propios y extraños, y que bien pronto la oposición empezó a poner en duda que el presidente cumpliera lo dicho. No obstante, ZP cumplió su promesa y se presentó en ambas ciudades. Un golpe de efecto que encandiló a los suyos y dejó tocados de un ala a sus adversarios.

Los socialistas de Ceuta vivieron unos momentos extraordinarios y gozaron de lo lindo con el gesto del presidente. Fueron horas inolvidables, me consta, para Antonia María Palomo y para cuantos socialistas de verdad llevan mucho tiempo aguantando desaires y comentarios falsos sobre la falta de ceutismo que les achacan. Como si ellos no hubieran nacido en esta tierra y no quisieran lo mejor para ella. De ahí que ver al presidente del Gobierno transitar por las calles, sin perder en ningún momento la sonrisa y mostrándose tan cercano y afable, me hizo pensar que el partido socialista de Ceuta podría remontar el vuelo en sitio donde innumerables ciudadanos votan al PP, porque creen que con sus gobernantes están más protegidos de las continuas afrentas que no cesan por parte de las autoridades marroquíes. Pues bien, de aquella visita crucial, casi nadie se acuerda ya. Y peor aún: los socialistas de Ceuta no han podido sacarle réditos a ese capital que fue la llegada de ZP a una ciudad que hasta entonces había sido olvidada por los presidentes. Miento: Adolfo Suárez sí estuvo aquí.

Digo que no han podido obtener beneficios de semejante acontecimiento, y no que no hayan sabido, como opinan muchos. El problema de los socialistas de Ceuta es que se encuentran atados de pies y manos ante un Gobierno que prefiere entenderse con Marruecos en cuestiones fundamentales, aunque sea a costa de tener que tragarse todos los sapos del mundo en relación con esta tierra. Al Gobierno le importa un pito que las autoridades marroquíes hieran, un día sí y otro también, la susceptibilidad de los nacidos en esta tierra. Y menos le importa el bajarse los pantalones ante cualquier medida oprobiosa que ataque los sentimiento de unos ceutíes que, con razón, andan siempre con la mosca de la traición detrás de la oreja.

Por consiguiente, lo ocurrido con los coches regalados a Marruecos, y las declaraciones inoportunas del delegado del Gobierno, han sido gestos más que suficientes para que los ciudadanos se tomen el desquite cuando les toque votar. Algo que no merecen, de ningún modo, los socialistas de Ceuta.

Nota: Ayer, escribimos Jerónimo en vez de Jenaro García.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto