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El V Convenio colectivo de Empresas de Enseñanza Privada
sostenida total o parcialmente con fondos públicos fue
firmado, el pasado lunes, por todos los sindicatos afectados
excepto por uno. Después de tres años de negociaciones
estancadas, USO decidió no adherirse al acuerdo en el que
FETE-UGT, CCOO y FSIE si han estampado su rúbrica, porque se
“limita” a asumir las últimas reformas legales cuyo
cumplimiento es imperativo por ley. El texto actual
contempla la extensión del ámbito temporal hasta diciembre
de 2008 y la actualización del documento y los salarios a la
legislación vigente.
De esta forma, se establece la jornada de 25 horas lectivas,
se reduce a 1.600 horas en computo anual, para el personal
del PAS, se incrementa dos días más en vacaciones al
personal de servicios (“propuesta planteada por USO”), y se
incrementa el articulado de Prevención de Riesgos Laborales.
Mientras FETE-UGT reitera su apoyo al nuevo convenio
suscrito con las organizaciones patronales, USO muestra su
decepción en el grueso de los contenidos. Y es que en el
marco retributivo, el citado incremento del 3,45% en el
salario base ya estaba establecido en los Presupuestos
Generales del Estado; el crecimiento en un 3% para los
docentes de Bachilleratos no concertados e Infantil es un
“claro retroceso” que se plasmará en “un mayor retraso en
las homologaciones y salarios inferiores a los de Primaria
para Infantil”.
Al respecto de la jornada, USO critica que no se reduzca el
número de horas de clase ni se impida que la jornada no
lectiva se pueda realizar los sábados. Asimismo, se
“permite” el contrato por obra o servicio para optativas o
en niveles objeto de subvención, puestos que solían estar
cubiertos por indefinidos “aumentando” la precariedad
laboral en los centros educativos.
Uno de los puntos más conflictivos para USO es el referente
a la paga de antigüedad. La nueva regulación del convenio es
“un retroceso” con respecto al anterior porque se vincula el
procedimiento y el calendario de abono a los futuros
acuerdos en las comunidades autónomas. Así, las situaciones
transitorias que en el IV convenio eran un derecho, ahora
necesitan un reconocimiento de las regiones implicadas. Para
el sindicato, el actual convenio sin cláusula de revisión
“no define nada”.
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