Tal y como se especulaba, el incendio de los vehículos que
se encontraban almacenados en depósito judicial en el Muelle
de Poniente fue provocado. Apenas unas horas después de que
se produjera el suceso, que se saldó finalmente con una
treintena de vehículos calcinados, una patrulla de la
Guardia Civil que se encontraba por la zona detuvo a tres
menores como presuntos autores de los hechos.
Se trata de tres marroquíes menores de edad: T.B. y M.D.,
nacidos en 1994, y A.E., nacido en 1992. Los tres son
residentes del centro de San Antonio y fueron presentados
ante la Fiscalía de Menores que se encargará a partir de
ahora de imponerles el castigo pertinente por la comisión de
este acto vandálico.
Según las declaraciones efectuadas por el propio delegado
del Gobierno, lo que aún se desconoce es si la intención de
los menores era la de provocar un fuego de grandes
proporciones.
Los vehículos siniestrados permanecían en el recinto
portuario como depósito judicial tras haber sido decomisados
por los miembros de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del
Estado por transporte de drogas o de inmigrantes.
El incendio, que provocó una intensa humareda, obligó a que
el Servicio de Extinción de Incendios de la Ciudad Autónoma
desplegara a catorce bomberos, cuatro cubas y dos camiones
para su transporte.
El fuego fue extinguido en apenas dos horas y necesitó de
casi 65.000 litros de agua y de abundante espuma para
aplacarse.
Éste no ha sido el primer incendio que se produce en esta
zona del recinto de la Autoridad Portuaria, al final de la
avenida Muelle Cañonero Dato, ya que hace apenas un año,
varias decenas de vehículos también almacenados en depósito
en este lugar ardieron por causas desconocidas provocando,
igualmente, el despliegue de los miembros del servicio de
emergencias del 080.
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