Es cierto. Los Juzgados de
Marbella y sus personajes famosos han colapsado parte de la
información y de la atención, mientras que el resto hacíamos
quinielas para acertar si la Pantoja acudiría o no al
Hospital Clínico de Jaén a visitar a Julián Muñoz. Los
programas han llegado a considerar apasionantes todo tipo de
disertaciones sobre el grosor de las arterias del ex -
alcalde y sobre el riesgo de formación de trombos, más
explicaciones gráficas de lo que es un desagradable
cateterismo. Ahora mi opinión :Para mí que, a Julián le
deberían anticoagular, aunque posteriormente resulten muy
fatigosos los controles de la sangre, con muchas idas y
venidas a los centros de salud para hacer los análisis que,
en mi barrio se dicen “los analíses”.
De hecho hemos estado extraordinariamente entretenidos “Ha
caído Zambrano” “¿Quién, el que estaba casado con la de
“Marina Flor”?”. Aquí todos conocemos a todos, personalmente
o por las televisiones y la Costa es un inmenso corralón de
anécdotas y chismografía. Tan ocupados hemos estado que, la
visita, claramente innecesaria y extemporánea, del
dictadorzuelo guineano Obiang ha pasado casi desapercibida.
Algún comentario sobre la reticencia de Rajoy a reunirse con
ese déspota sin ilustrar, porque, los del Despotismo
Ilustrado de antaño estaban muy puestos, mientras que el
tirano de Guinea que posee un territorio inmensamente pobre
en calidad de vida y muy rico en petróleo, ha hecho somera
alusión al respeto de los Derechos Humanos y ha excarcelado
a algunos presos políticos como muestra de talante.
Cuando ese desventurado país era Guinea Española, otro gallo
cantaba a la población, los españoles siempre hemos
apreciado mucho a los guineanos, que son laboriosos y buena
gente, han mamado cultura española y son plenamente
integrables. La tragedia guineana han sido sus presidentes
que han hecho retroceder al país cincuenta años atrás a la
llegada de los españoles. En verdad que, en nuestros
antiguos Protectorados, se protegía a la población, que
vivía infinitamente mejor con nosotros que posteriormente,
cuando abandonamos los territorios. Si no que se lo
pregunten a los saharaouis.
Malaya-3 ha opacado al dictador cuya indeseable visita ha
sido un logro personal de Moratinos, que siempre pica alto
en política exterior, el próximo invitado podría ser el
presidente de Guinea Conakry o de Papua Nueva Guinea, todos
ellos países prósperos con los que se establecen relaciones
comerciales al más alto nivel y de los que se pueden obtener
grandes beneficios económicos para el pueblo español e
incluso pueden establecer oenegés en nuestro territorio para
ayudar a los millones de ciudadanos que viven bajo el umbral
de la pobreza. ¿Qué dicen? ¿Qué si estoy de coña? Pues si.
Si lo estoy . Y he echado de menos las manifestaciones de
los defensores de los Derechos Humanos. Pero los
“concienciados” debían estar, como todos, disfrutando frente
al televisor mientras, en los programas, disertaban
sesudamente destripando y linchando a la rubia Mayte
Zaldíbar a la que, ayer, dieran palmaditas en la espalda
cuando bufaba sus fulminaciones de mujer despechada. Como
ven, estábamos demasiado entretenidos como para pensar en el
estrafalario viaje español de Obiang.
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