La demolición de las viviendas construidas ilegalmente en
los terrenos que el Ministerio de Defensa tiene en El
Serrallo continúa mañana miércoles con el desalojo de una de
las nueve casas que aún quedan en pie tras recibir el visto
bueno de las autoridades judiciales.
Ésta es una de las actuaciones previstas para la
construcción de la base única militar que permitirá la
liberación de suelo, propiedad de Defensa, en terrenos
próximos al centro urbano.
Las viviendas ubicadas en El Serrallo, junto a Sidi Embarek,
y en el Tejar de Ingenieros están siendo expropiadas poco a
poco ya que ocupan parte del terreno previsto para esta base
única que llegará hasta el acuartelamiento ‘Coronel Galindo’
sede del Regimiento de Caballería Acorazado Montesa nº3 y
que discurre paralelo al Arroyo del Infierno y se prevé que
este proceso finalice el próximo verano.
Pendiente queda aún la ejecución del segundo convenio
firmado entre el Gobierno ceutí y el Ministerio de Defensa
paralizado porque exige una modificación del Plan General de
Ordenación Urbana (PGOU) que debe ser aprobado por el
Ministerio de Fomento que es quién ostenta las competencias
ceutíes de urbanismo.
En el momento en que quede aprobado dicho convenio, firmado
en 2004, las torres medievales, el acuartelamiento Teniente
Ruiz y algunas parcelas pasarán a manos del Gobierno local
mientras que Defensa, a través de la Comandancia General de
Ceuta, recibirá algunas parcelas. En estos momentos, las
parcelas y los edificios están cedidos y cada uno asume ya
los gastos de mantenimiento de estos inmuebles aunque, al no
ser aún efectivo el convenio, no pueden realizar obras ni
cambios en las instalaciones porque todavía no ostentan su
titularidad.
Con la puesta en marcha de la base única quedarán libres
algunos acuartelamientos que pasarán a ser gestionados por
la Ciudad tales como: el Fiscer, el RACA-30 o el emblemático
cuartel de Regulares que albergará el archivo municipal y el
museo de la unidad entre otros servicios. De este modo
quedarán fuera de la base única solamente el acuartelamiento
de Ingenieros, en El Jaral, y el del monte Hacho, además del
edificio de la Comandancia General.
Una vez que se ejecute el contenido de este segundo convenio
se firmarán más ya que la vinculación entre la Ciudad
Autónoma y Defensa y todo aquello que tiene que ver con lo
militar es muy fuerte.
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