El Ciudad de Ceuta continúa intratable en el Díaz-Flor. El
Villarrasa, que llegaba como líder del grupo, se fue
encajando la primera goleada de la temporada. Los pupilos de
Fernando Muñoz, muy serios en todo momento, completaron sin
duda su mejor partido frente a un conjunto cordobés que en
ningún momento se esperaba a un rival como lo fue el
caballa.
El partido comenzó con oportunidades para ambos equipos,
como el lanzamiento de Raúl que salió por la línea de fondo
por muy poco o la contra del Villarrasa que despejó a córner
Oscar. Sin embargo, con el paso de los minutos el Ciudad de
Ceuta se fue haciendo con el balón, y con las oportunidades
de gol. De esta forma, y tras nueve minutos de juego,
Reinoso consiguió adelantar a su equipo con un fuerte
disparo desde quince metros que sorprendió a la defensa y al
portero del equipo cordobés.
Con el marcador a favor el combinado caballa continuó con
las ofensivas que darían fruto, tres minutos después, con el
segundo tanto obra de Raúl a pase de Lolo en el saque de una
falta. Con dos arriba, y lejos de aguantar el resultado los
de Fernando continuaron acosando al Villarrasa que se veía
superado en todos los niveles por los ceutíes que volvían a
marcar, a cuatro minutos del final de la primera parte,
gracias a José Carlos, que estuvo rapidísimo al rematar de
cabeza un rechace de la defensa cordobesa.
Con la tranquilidad que da el ir ganado por tres goles, el
Ciudad de Ceuta saltó a la pista en la segunda mitad de la
misma forma que en la primera; presionando, corriendo,
creando ocasiones y finalmente, marcando. Esta vez fue Dani,
portero del filial unionista, quien estuvo espléndido
durante todo el encuentro, quien marcó el cuarto de doble
penalti, demostrando que es un seguro, al igual que bajo los
tres palos, en este tipo de lanzamientos.
Los de Fernando empezaron entonces a creerse la victoria, y
por goleada, frente al Villarrasa, y comenzaron a crear un
juego tan brillante como vistoso, que culminó con el quinto
del equipo tras una bonita jugada personal de Oscar, que
definió él mismo. Con este resultado el conjunto cordobés se
hecho al ataque a la desesperada, pero sus ofensivas se
estrellaban siempre en la defensa blanquinegra y en un
magnífico Dani. Sin embargo, y a pocos minutos del final, el
Villarrasa consiguió marcar el gol del honor por medio de
una falta lanzada por Francisco que se coló entre la barrera
y terminó en las redes de la portería defendida en ese
momento por Yasir, que había salido en sustitución del
portero titular.
Cuando se daba por bueno el 5-1 a favor, y a dos minutos del
pitido final, un doble penalti para el Ciudad de Ceuta causó
que Fernando volviese a meter en el campo a Dani, que de
nuevo, de un potente disparo colocado a la escuadra derecha,
conseguía batir al guardameta del Villarrasa, marcando el
sexto y definitivo para su equipo.
Al final del encuentro para el técnico caballa sobraban
adjetivos, y con razón, puesto que su equipo le acababa de
dar un auténtico repaso a un líder que en el Díaz-Flor no
pareció serlo. Ni mucho menos.
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