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El Club Natación Caballa no pudo sumar su primera victoria
en el debut liguero frente al Limoneros. El partido, que se
desarrollo en la Ciudad Deportiva Carranque, estuvo dominado
casi en su totalidad por un combinado caballa que llegaba a
Málaga mermado a causa de las bajas de José Luis Aróstegui,
por lesión, y de Rafael Martínez-Peñalver y Ángel Ruiz, por
sanción.
Los de Miguel Ángel Ríos, comenzaron el encuentro muy
serios, consiguiendo llegar al final del primer tiempo con
un 2-3 a favor. La segunda parte estuvo marcada por la
primera de las dos expulsiones que sufrió el Caballa, de
José Manuel Martínez, al considerar los árbitros que se
había excedido al protestar la segunda expulsión, que según
el técnico ceutí, fue totalmente injustificada. A pesar de
ello, los jugadores caballas consiguieron terminar el
parcial con un resultado de 5-7 de nuevo a favor.
El tercer tiempo, aunque más ajustado en juego, finalizó de
la misma forma de la que había terminado los dos primeros,
con victoria parcial para los de Ríos por 8-9. Con este
marcador, y habiendo dominado el Caballa el resultado en
todos los compases del partido, se llegó al cuarto y último
tiempo en el que una segunda expulsión para el conjunto
ceutí, de Lucas Artesero, cuando el partido estaba con
empate a diez goles, propició que el combinado malagueño
consiguiese el último tanto que le dio la victoria. Aún así
los pupilos de Ríos tuvieron una última oportunidad de
empatar, a falta de pocos segundos del pitido final, que no
pudieron materializar.
Los caballas, que la próxima jornada se enfrentarán a un
Sevilla-Emanasa que venció en su debut frente al CW Málaga,
seguirán sin poder contar con las tres bajas de la primera
jornada, teniendo la necesidad de sumar los dos primeros
puntos en el Pabellón Polideportivo Díaz-Flor, si no quieren
caer en la zona baja de la tabla, con dos derrotas en dos
partidos, y tener la oportunidad de seguir peleando en la
parte cómoda. Difícil primer rival en casa les espera a los
jugadores caballas.
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Ríos: “Ha sido un arbitraje pésimo, entre ellos
mismos no sabían ni qué señalar”
Miguel Ángel Ríos se encontraba
muy indignado con la labor de los colegiados sevillanos
Eduardo Hernández y Manuel Lombilla una vez finalizado el
encuentro frente al Limoneros. Para el técnico caballa la
expulsión de José Manuel Martínez en el ecuador de la
segunda parte fue totalmente injustificada. “José Manuel
cayó en la trampa de uno de los jugadores contrarios por la
cual le expulsaron por primera vez, pero la segunda jugada
no fue motivo en absoluto para la sanción y mucho menos la
tercera por protestar”, aclaró Ríos.
El técnico ceutí tildó la labor de los arbitros de pésima.
“Realmente fue un arbitraje pésimo, incluso entre ellos
mismos se corregían, porque no sabían muchas vences ni qué
señalar” declaró.
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waterpolo / primera andaluza
