No pudo el Goyu-Ryu con el Real Betis Balompié, el líder, y
las previsiones del técnico gimnasta Damián Torres se
cumplieron, lamentablemente. Con diferencia, el conjunto
verdiblanco que dirige esta temporada José Luis Mena es el
mejor equipo del grupo cuarto de División de Honor Juvenil,
y lo demuestra en el campo.
El Betis llegó al Federativo con el mono de trabajo puesto,
y la vitola de líder se la dejó en el barco que le trajo a
Ceuta. Nada daban por ganado los béticos de antemano, y
desde el minuto uno de partido se pusieron manos a la obra
para ‘construir’ un buen resultado.
Los primeros quince minutos no tuvieron desperdicio ya que
se pudo presenciar unos grandes momentos de juego, por
velocidad, intensidad y calidad, tanto por el bando bético
como por el gimnasta, con el agravante de que se pudieron
ver dos goles, uno para cada equipo. Comenzaron marcando los
gimnasta, de penalti, tras la falta señalada por Mehdi, por
un empujón en el área pequeña del bético Víctor a Miguel,
que se encargó de transformar Luis.
Pero la alegría de los jugadores del Goyu-Ryu al verse por
delante en el marcador ante el todopoderoso Betis tan sólo
duró dos minutos, ya que en el once de juego, Eloy
restableció las tablas iniciales, en una jugada en la que
incluso se permitió el lujo de colocarse la pelota para el
disparo, sólo ante Samuel, que no pudo hacer más que
rescatar el esférico del fondo de las mallas.
Jorge pudo adelantar de nuevo a los gimnastas, pero la
estirada de Ricardo, y que ningún compañero acompañara al
punta en el ataque propició que no se pudiera ejecutar una
segunda jugada.
Esta situación no agradó en modo alguno a los béticos, que
se lanzaron, ordenadamente, al ataque, pero unas grandes
intervenciones de Samu evitaron momentáneamente que el Betis
marchara por delante en el marcador. Pero en el 34, Carlos
transformaba el segundo gol verdiblanco,en una gran jugada,
que contó con la fortuna por aliada, ya que en ese momento
el Goyu-Ryu estaba con diez sobre el artificial por la
lesión de Younnes. Con este marcador los equipos se
marcharon al vestuario.
Nada más iniciarse la segunda parte, Jorge tuvo en sus botas
el empate, pero Ricardo le ganó la partida, y a la media
hora de juego de la segunda parte, Jesús y Cristian Salcedo
no estuvieron rápidos para resolver ante el meta del equipo
sevillano, perdiendo las dos ocasiones de la segunda mitad.
Tras la reanudación, el Betis se lo tomó con tranquilidad, y
dejó la iniciativa del juego al Goyu-Ryu. Los béticos se
metieron en su campo, con lo que los gimnastas adelantaron
líneas cayendo en el error de perder en centro del campo. A
la contra, los verdiblancos fueron mortales. El Goyu-Ryu
volcado al ataque, dejó los espacios para que en el 76 Rico
batiera por bajo a Samu, y seis minutos después fuera Eloy
quien lo hiciera, sentenciando el encuentro por uno a
cuatro, que deja una buena imagen del Goyu-Ryu quien
sencillamente no pudo con el mejor equipo del grupo.
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