Se veía venir, o por lo menos era vox pópuli, pero ha tenido
que ser días después de la huida de los hermanos Narváez a
su Jerez natal cuando el club reconozca públicamente que los
que un día fueron jugadores del Asociación Deportiva Ceuta
no tienen la menor intención de volver a la formación ceutí.
Hace una semana que se recibía en las redacciones de los
medios de comunicación de la ciudad un comunicado del club
en el que se aseguraba que los hermanos Narváez habían
abandonado la disciplina de la A.D Ceuta, con permiso de la
entidad, durante un período que no superaría la semana.
Un comunicado que justificaba la actitud de los futbolistas
y que sonaba a que el club estaba intentando mantener la
cara ante una situación que se le estaba escapando de las
manos. Ha sido precisamente hoy, cuando ha trascurrido justo
una semana del primer comunicado, que la A.D Ceuta se ha
visto obligada ha admitir la cruel realidad. Los hermanos
Narváez no volverán.
La ‘espantada’ de los gaditanos ha sido calificada por el
club como, “la decisión de no continuar jugando con la
Asociación Deportiva Ceuta”. Un hecho que resulta cuando
menos curioso, ya que es una situación atípica que una de
las partes, en este caso los hermanos Narváez, decidan
unilateralmente acabar con un compromiso en el que están
relacionadas dos partes.
Por último, habrá que esperar cual es la reacción de un club
que ha sido ninguneado por dos chicos que no superan
prácticamente la veintena de años y que han decidido que
esta entidad no se merece hacer las cosas con respeto.
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