Nicolás Fernández Cucurull, senador por Ceuta del Partido
Popular y responsable del proyecto de la Manzana del
Revellín en su etapa de consejero de Obras Públicas quiso
personarse en la rueda d de prensa posterior al consejo de
Gobierno escoltando a Yolanda Bel, portavoz del Gobierno.
Cucurull señaló visiblemente molesto que el proyecto de
arquitecto portugués Álvaro Siza para construir un complejo
cultural en la ciudad no es un "delito urbanístico", pese a
que el Tribunal de Justicia de Andalucía (TSJA) haya
declarado "ilegal" el uso de la parcela y su edificación
diferida.
El senador y diputado de la Asamblea dejó claro que se
sentía “muy orgulloso de haber participado” en el proyecto
que es ya “una realidad imparable”.
En la rueda de prensa habitual de los viernes, el senador
por Ceuta del PP y ex consejero de Obras Públicas del
Gobierno ceutí, Nicolás Fernández Cucurull, señaló que este
proyecto no es "ningún delito urbanístico sino que, en todo
caso, la sentencia supondrá la anulación de un acto
administrativo". El senador dijo que el Gobierno ceutí "se
encontró un problema heredado del GIL ya que la parcela
había sido vendida a una sociedad privada con un 49 por
ciento de aprovechamiento comercial".
Porcentajes claros
Cucurull destacó que el PP negoció con el propietario de la
parcela para recuperar el proyecto de Siza “y hemos logrado
que sea una parcela de propiedad pública con más de un 70
por ciento de superficie cultural".
Aunque, el senador recordó que la sentencia el TSJA "no
determina el porcentaje que es excesivo, pero los mismos se
ajustan al PGOU, de ahí al recurso de casación presentado
ante el Tribunal Supremo".
Cucurull, al igual que el letrado de la Ciudad, señaló que
sería deseable que el TSJA concretase los porcentajes que
considera óptimos para ajustar el proyecto a las decisiones
judiciales.
En opinión del senador, muy molesto ante las insinuaciones
de su responsabilidad en un delito urbanístico, aseguró que
la recuperación de la Manzana del Revellín no "se realizó
por ninguna relación de contrapartidas por la moción de
censura" que permitió al Partido Popular derrocar al GIL del
poder. en el Ayuntamiento de la Ciudad Autónoma. En la
parcela se ha destinado un 72 por ciento al uso cultural con
la construcción de un teatro y un auditorium y un 28 por
ciento al uso comercial.
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