La última jornada de la Liga del grupo octavo de Primera
Nacional de ‘A’ de fútbol sala, porque poco o nada había
quedado aplazado para resolver en el última jornada, todo el
pescado estaba vendido.
El Torremolinos ya había conseguido la pasada semana el
título de campeón de Liga, que asciende a la categoría de
Plata, al igual que el conjunto de la Unión África Ceutí,
que era matemáticamente el segundo de grupo, y los descenso
también estaban certificados: Pino Montano por la renuncia a
disputar el campeonato, Cincocina Mancha Real y el Atarfe
Siglo XXI, filial de Las Gabias, que con la perdida de estos
últimos de la categoría de Plata arrastran a su filial a la
Nacional ‘B’.
No hubieron sorpresas. El Torremolinos se impuso a domicilio
al descendido Mancha Real, el Ceutí hizo lo propio en la
pista de Cádiz FS y el Virgili, que se consolidó en esta
última jornada como tercero de este grupo, se impuso en la
pista del Melilla, en uno de los pocos partidos con cierta
trascendencia para alguno de sus contendientes, en este caso
para el conjunto gaditano.
Pero los melillenses se lo pusieron difícil a los del
Virgili, ya que vencían al término de los primeros veinte
minutos por 2-1 con goles de Amador y Gustavo Bravo, donde
fueron siempre por delante los melillenses en el tanteador.
Pero pudieron los de Marcos Sánchez rematar la “faena” de
final de competición, brindando lo que hubiese sido no sólo
una victoria a sus incondicionales, sino dejando al tiempo,
de cara a la venidera temporada, un grato sabor de boca,
puesto que al final del partido ante los gaditanos,
perdieron por 3-5, en un encuentro que se caracterizó, sobre
todo por las ganas que pusieron uno y otro rival en cancha
de juego.
El 1-0 tardo algo en subir al marcador local. Fue en el
minuto 12 de partido cuando un perfecto pase, de tacón, de
Francis Andujar sobre su compañero Fran Amador, haría que
éste marcara a portería vacía.
Los gaditanos, siete minutos más tarde, en el 19 de partido,
consiguieron la igualada a costa de una jugada bien trenzada
y en la que prácticamente participaron todos los jugadores
de campo.
Pero antes del descanso sería el jugador local Gustavo Bravo
quien marcaba el esperanzador 2-1 con una buena asistencia
de Vicky, resultado éste con el que se concluirían los
veinte primeros minutos de encuentro.
Pero como la confianza y más en deporte, siempre continúa
matando a los hombres, en este caso a los deportistas, el
segundo período fue bien distinto al primero y así tenemos
que los gaditanos saltaron dispuestos a todo y se
adelantarían con sendos goles poniendo el 2-3 en emarcador
incluso antes de que el reloj marcase los primeros cinco
minutos de este período, es decir el 25 de partido.
Seis minutos más tarde, de nuevo sería Fran Amador quien
establecería el empate a 3 goles, pero en la recta final,
con Gustavo Bravo puesto por su técnico, Marcos Sánchez,
como portero-jugador, saldrían tan mal las cosas que en los
minutos 37 y 38 sendos tantos gaditanos harían ya no moverse
ese consabido marcador de final de encuentro de 3-5.
|