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Los vecinos de la desconocida calle Valdés Leal, situada en
la parte de los antiguos vestuarios del Estadio Alfonso
Murube, se han puesto en contacto con este rotativo para
denunciar un hecho que les tiene bastante cansados ya que
afirman que de seguir así la situación cualquier día puede
ocurrir alguna desgracia si las autoridades competentes no
ponen remedio de inmediato.
Esta insostenible situación es debido a un indigente, el
cual según los vecinos, no anda muy bien de la cabeza. El
citado indigente lleva ya varios meses afincados en una de
las puertas del gol sur del Estadio Alfonso Murube y además
de acumular un gran número de desperdicios, que atentan
contra la salud ciudadana y el medio ambiente, se dedica a
prender fuego a la zona ocasionando el consiguiente peligro
para los que allí viven y requiriéndose la rápida y efectiva
presencia del Cuerpo de Bomberos, los cuales en lo que va de
año ya han tenido que subir a sofocar algún que otro
incendio más de cinco veces.
Los vecinos, cansados de esta situación, no entienden ni
comprenden como una persona en ese estado tan lamentable y
con notables muestras de problemas mentales y en normalmente
agresivo esté provocando todos estos altercados sin que las
autoridades pertinentes pongan remedio, afirmando que tanto
la Policía Local como la Policía Nacional tienen constancia
de ello, ya que se han personado alguna que otra vez en la
zona, y pese a todo el indigente sigue haciendo de la suya.
Además los vecinos también afirman que ya no es solo el
problema que pueda ocasionar esta persona, sino que se trata
de un ser humano que debe recibir asistencia y que no se
debe permitir que esté en las condiciones que se encuentra
actualmente, recorriendo la barriada de contenedor en
contenedor buscando entre la basura para posteriormente
recoger lo que él cree necesario para llevarlo hasta su
vivienda (en una de las puertas del Estado Alfonso Murube).
Por último los vecinos de la zona temen que cualquier día
los incendios provocados por este individuo lleguen a ser
algo mayor y provoquen una tragedia que tengan que lamentar
y todo por la incompetencia de las autoridades pertinentes,
las cuales desde hace meses hacen oidos sordos a sus quejas
y no ponen remedio a esta situación que está crispando los
nervios a los vecinos ya que tienen que sufrir dia tras dia
la presencia de este indigente, de sus desperdicios
acumulados y de sus actividades paranoicas.
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BARRIADA / PROBLEMÁTICA
