La compatibilidad de los cargos que ostenta Celinia de
Miguel, hasta hora vicepresidenta de la Mesa Rectora y desde
ahora viceconsejera de sanidad y Consumo, fue el único punto
de discordia en el pleno extraordinario de ayer. La
propuesta de Presidencia argumentaba una cuestión de ahorro
y eficacia al ser De Miguel una persona que ya conoce el
área. La decisión está tomada también, alegó Vivas, como
apoyo a la consejera de Sanidad, ahora también portavoz del
Gobierno. De Miguel, apuntan desde el Ejecutivo, no
percibirá remuneración añadida.
|