“El papel del Consejo Económico y Social es fundamental en
una ciudad en la situación de Ceuta, con sus peculiaridades
geográficas y socioeconómicas”, avisa el presidente del CES
andaluz, Joaquín Galán, “sin el clima de paz social que
genera un órgano de interlocución directa y permanente como
es el Consejo Económico y Social, los poderes públicos
tendrían difícil sacar adelante las políticas económicas, y
no sólo aquellas que tienen su reflejo en los dictámenes e
informes”, explica Galán que da especial importancia al
valor de los estudios a iniciativa de los CEs, valiosos
instrumentos para las administraciones públicas. “Es
importante que se escuche a los CES”, dice, admitiendo que
el “grado de penetración” de los dictámenes de los CEs suele
ser mayor aceptación en la oposición que suele incluir las
recomendaciones en sus enmiendas en el Parlamento. Pero para
Galán, la cumbre del trabajo del CES se alcanza en los
informes emitidos por unanimidad, dictámenes a los que los
gobiernos son siempre “sensibles”.
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