Sábado de madrugada. Más de 24 horas después del supuesto
atentado sobre un ‘zeta’ radiopatrulla de la Nacional, un
vehículo de los llamados ‘K’ del Cuerpo Nacional de Policía,
con agentes de paisano pertenecientes a la brigada de
Policía Judicial patrullan por la barriada de Príncipe
Alfonso. El reloj apuntaba a la una de la madrugada cuando
los agentes detectaron la presencia sospechosa de un
individuo, viejo conocido por su delictiva reputación, que
al percatarse del seguimiento del ‘K’ esgrime una arma de
fuego para salir rápidamente a la huída.
Pese a la persecución por las angostas calles de la
barriada, el sospechoso logra evadir la acción policial en
ese momento.
Un dispositivo de control y de segumiento se pone en marcha
de inmediato. La Policía no puede permitir dejar escapar a
nadie que empuñe un arma sin solictar los permisos
oportunos, y menos, el individuo en cuestión -un ceutí de
unos 30 años- con numerosos antecedentes policiales y el
cumplimiento de una larga condena en cárceles de la
península por homicidio.
La paciencia y la espera, la mejor arma policial en estos
casos, se pone en práctica hasta que la “liebre salga de su
madriguera”. El domingo transcurre sin noticias aunque con
los ojos bien abiertos. La presencia de este individuo y su
seguimiento se suma ahora a la investigación seguida como
consecuencia de la ráfaga de disparos que oyó una patrulla
de la Nacional sobre las 22’30 horas de la noche del viernes
y que aún continúa.
La mañana del lunes es positiva, al menos, para uno de los
objetivos seguidos por los miembros de la ‘Judicial’. El
individuo que se les escapó a los agentes en la
noche-madrugada del sábado al domingo es, de nuevo, avistado
por los agentes. Ahora sí, y con la colaboración de la
Policía Local se logra su detención.
La noticia de la detención de este sujeto levanta el rumor
sobre la posibilidad de que sea éste el autor de los
disparos al ‘zeta’ de la nacional pero... no es así.
Este detenido por su relación con el ‘hampa’ y su
trayectoria delictiva podría conocer datos al respecto, pero
con sus antecedentes y empuñando un arma ante los ojos de la
Policía, es más que suficiente como para provocar su
detención. A lo largo de esta mañana pasará a disposición
judicial por tenencia ilícita de armas mientras que la
Policía Nacional continúa hoy miércoles la búsqueda del
autor material del supuesto atentado del viernes.
Investigación
La Policía Judicial continúa con las pesquisas para
descubrir al autor de la ráfaga de disparos realizados desde
El Príncipe en la noche del pasado viernes.
¿Atentado?
En realidad, tras un exhaustivo trabajo en la búsqueda de
casquillos y restos de impactos, la policía científica halló
varios casquillos en la zona desde donde se oyeron las
detonaciones pero no se encontraron impactos en el alrededor
del vehículos que, supuestamente, fue tiroteado. Los
hallados en la pared de las naves no corresponden a esa
ráfaga según las pesquisas.
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