Zapatero ha hecho un
llamamiento especial a la sociedad vasca (\"la que más
directamente ha sufrido el dolor y el horror\", dijo) para
trasladarle un mensaje de confianza y de responsabilidad
como \"impulsora esencial\" del fin de la violencia y Llamó
a la unidad de todos los partidos. Tiene previsto reuniones
con las distintas formaciones políticas.
El presidente del Gobierno ha considerado que la reunión del
próximo martes con el jefe de la oposición es “algo más,
incluso que una convocatoria del Pacto Antiterrorista”.
Los españoles podemos, ¿por qué no? pensar que con este paso
pudieramos estar en el principio del fin de más de treinta
años de horror y terror. La democracia siempre ha sabido
resolver los problemas más difíciles. ¿No es el terrorismo
uno de ellos?.
Cierto es que, poco a poco, veremos y sabremos contenidos y
consecuencias directas e indirectas. Que la organización
terrorista ETA se encuentra debilitada es una evidencia tras
los continuados ‘golpes’ policiales que ha venido recibiendo
la banda en los últimos años. La dureza contra el terrorismo
empleada por la administración Aznar ha podido posibilitar
esta debilidad. La continuidad en las acciones policiales
han sido, también evidentes en la administración Zapatero,
aunque el ‘talante’ desde un principio fue claramente
tendente a una salida dialogada.
Los jueces advierten que seguirán aplicando la Ley
enarbolando la bandera de su independencia en un modelo de
Estado, como el nuestro, basado en la división de poderes.
El paso dado por ETA debe ser muy bien analizado. El
histórico momento puede dar pie a avances concretos. Pero
siempre desde la unión política y el obligado consenso. Sí
hay vencedores y vencidos. Vencededores los demócratas;
vencidos los asesinos. Desde esta premisa, las armas deben
quedar sobre la mesa y ETA disuelta antes de dar paso a
argumentos políticos. Sólo así podríamos estar en el inicio
del principio del fin del terrorismo.
|