Escaparates rotos, mobiliaro urbano destrozado, agresiones y
ataques a los autobuses urbanos fueron el triste contrapunto
a la tranquilidad con la que transcurrió la marcha “Por la
convivencia y contra el racismo” convocada este pasado
viernes por UDCE, IU, JJDD y siete asociaciones más.
Estos actos vandálicos, aislados y protagonizados por unas
decenas de incontrolados al finalizar la concentración,
sembraron el miedo entre los vecinos del centro de la ciudad
y dejaron el aire varias preguntas sin resolver: si estos
hechos eran previsibles y se sabía de antemano que había
“puntos calientes” en las cercanías del Palacio de la
Asamblea, punto final de la manifestación, ¿por qué no se
reforzó la seguridad en la zona?
Y si, como parece, la Policía Nacional, responsable de la
seguridad en estos casos, había concentrado sus esfuerzos en
el recorrido de la marcha relegando a la Policía Local a
tareas de seguridad vial, ¿quién velaba por la tranquilidad
en el resto de Ceuta, ajeno al transcurso de la marcha?
Comerciantes y sindicatos de Policía se hacen las mismas
preguntas. Andrés Carrera, del Sindicato Unificado de
Policía, felicita a los convocantes por la tranquilidad con
la que transcurrió la marcha, pero lamenta los actos
vandálicos posteriores.
En cambio, el portavoz sindical de la Policía Nacional sí
reconoce su sorpresa ante la aparente ausencia de la Policía
Local, no ya a lo largo del recorrido de la manifestación,
lo cual considera “lógico por precaución”, “pero no en el
resto de la ciudad”, matiza Carrera.
Sesenta agentes en la calle
En previsión de disturbios y por precaución ante posibles
roces entre los manifestantes y la Policía Local, el Jefe
Superior de la Policía optó por relegar al Cuerpo de Policía
Local a tareas de seguridad vial, como establece la ley en
estos casos, y centrar a la Policía Nacional en la
vigilancia de la seguridad de la marcha. Así, veinte agentes
de la Policía Local cubrían en la noche del viernes el
servicio del 092. Otros veinte regulaban el tráfico y al
menos una treintena de agentes de dos unidades de la Unidad
de Intervención Rápida (U.I.R.) vigilaban el Palacio
Municipal y las dependencias de la Policía Local, es decir
aguardaban ‘acuartelados’ para actuar en caso necesario. Un
total de setenta agentes, una cifra abultada si tenemos en
cuenta que sólo vigilaban el tráfico.
“Un día duro para todos”
Los actos de vandalismo apenas duraron una hora y, gracias a
la intervención de la Policía, quedó todo en un mal rato y
daños materiales. Pero fue tiempo suficiente para que el
nerviosismo y las “ganas de hacer su trabajo” hicieran mella
en la Policía Local que atendió más de setenta llamadas que
no podía satisfacer pues las competencias en seguridad
ciudadana correspondían a la Policía Nacional. Así lo
relatan fuentes sindicales de la Policía Local, que harán
pública su postura bajo sus siglas mañana lunes, pues este
“es un problema de seguridad y no una cuestión de orden
laboral” pero sí reconocen que “fue un día duro para todos
que ha dejado malestar entre los compañeros”, repasa este
agente de la Policía Local para quien la “precaución
política” pudo tener graves consecuencias en materia de
seguridad ciudadana. Tras las consignas, los nervios, y
algún escaparate roto es momento de repasar a lo aprendido
para, la próxima vez, no volver a cometer los mismos
errores.
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La Ciudad defiende el trabajo de sus agentes
“La Policía Local hizo su
trabajo y lo hizo regulando el tráfico, accesos a la ciudad,
desviaciones y rutas alternativas a la manifestación porque
esa es la función que atribuye la Ley a la Policía Local en
este tipo de acocntecimientos”, explica Ángel Gómez,
director general de Gobernación de la Ciudad Autónoma.
Todas las llamadas del 092 se atendieron y agentes de la
Policía Local colaboraron en las detenciones”, subraya Gómez
“La Policía Local hizo bien su trabajo y no hubo incidencias
en el tráfico, que es su responsabilidad en este tipo de
actos, y después de la manifestación estuvimos presentes en
la calle como todos los días”, apuntó el responsable de la
Policía Local de la Ciudad Autónoma de Ceuta.
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