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El Pleno del Congreso paralizó ayer la puesta en marcha de
un mecanismo de actuación coordinada entre las
administraciones para situaciones de crisis, una iniciativa
que hacía especial hincapié en situaciones extremas de
presión migratoria sobre las fronteras, como las ocurridas
en las vallas de Ceuta y Melilla durante septiembre y
octubre del pasado año, o en las Islas Canarias a lo largo
del presente ejercicio. La proposición no de ley fue
desechada por el PSOE al considerar que mezclaba situaciones
poco comparables, como dramas humanitarios, incendios o
catástrofes marítimas, según informó el diputado popular por
Ceuta, Francisco Antonio González.
La iniciativa, presentada por la diputada por Valladolid,
Ana Torme, pretendía, en primer lugar, que el Gobierno
informase al Congreso sobre el protocolo de gestión de
crisis seguido en los incidentes en los que las Delegaciones
del Gobierno tienen responsabilidades atribuidas, como es el
caso de las avalanchas de inmigrantes en Ceuta, Melilla y
Canarias. Otras situaciones de crisis que se recuerdan
recientemente son los incendios de Andalucía en 2004 y
Guadalajara en 2005 (donde murieron 11 personas de la
brigada de extinción de incendios), y el hundimiento del
Barrio de El Carmelo en Barcelona. El primer punto de la
moción también instaba a explicar los resultados de las
Comisiones de Investigación abiertas para el estudio de las
causas del hundimiento de los pesqueros españoles ‘Siempre
Casina’ y ‘O Bahía’.
La proposición no de ley insta al Gobierno, en segundo
lugar, a elaborar en el plazo de un mes un Plan de actuación
y coordinación entre el Gobierno y las distintas
Administraciones Públicas, capaz de hacer frente de manera
eficaz a las distintas situaciones de crisis.
Presión migratoria
Por último y a modo de vigilancia y control de la
eficacia de este Plan integrado de actuación, la diputada
por Valladolid, Ana Torme, solicitó al ejecutivo socialista
remitir a la Cámara Baja, en cada ocasión en que sea
utilizado y con una periodicidad no superior a un año,un
informe sobre la coordinación de los distintos departamentos
ministeriales y las administraciones públicas en la gestión
de crisis, con especial hincapié en el control de la presión
migratoria sobre las fronteras.
Respuesta lenta
Durante la exposición de motivos, la diputada Ana Torme
explicó que “la respuesta del Gobierno y la activación de
gabinetes de crisis en las Delegaciones de Gobierno
correspondientes, ante las distintas catástrofes que se han
sucedido durante estos dos años, ha sido siempre lenta,
descoordinada y, en algunos casos, claramente ineficaz,
cuando no ha sido el caso de que ni tan siquiera se
convocaran los preceptivos gabinetes de crisis para
afrontar, de manera coordinada las graves situaciones
producidas. Resulta imprescindible que asuma una acción más
global y efectiva que permita anticipar las medidas a
adoptar ante posibles crisis”.
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La propuesta pedía un informe de control a la presión
migratoria
La actuación de la diputada
popular fue especialmente dura cuando se refirió a la
inmigración, asegurando cosas como que “la ineficacia en la
gestión se extiende también al problema de los inmigrantes
irregulares que llegan a la costa canaria, un problema
complejo y de múltiples dimensiones,pero ante todo un drama
humano que ha producido centenares de muertes que podrían
haberse evitado,de haber atendido los informes que el propio
Ejecutivo ha reconocido que tenía sobre este asunto”.
La propuesta popular incluía en su punto tercero la
necesidad de remitir a la Cámara, en cada ocasión en que sea
utilizado el Plan de actuación, un informe sobre la
coordinación de los distintos departamentos ministeriales y
las administraciones públicas poniendo un interés especial
en el control de la presión migratoria sobre las fronteras
de Ceuta, Canarias y Melilla.
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