El servicio de Costas de Málaga se halla a la espera del
resultado de las pruebas de calado solicitadas para
determinar con seguridad la eficacia de la obra del dique de
la playa de La Ribera, efectuada por la empresa Dragados y
cuya recepción se prevé para dentro de dos semanas. Ante las
quejas y rumores, por parte de los usuarios del foso de San
Felipe, de una nueva entrada de sedimentos que se depositan
en las cercanías del muro, el jefe del servicio de Costas,
Juan Fernández Rañada, ordenó la toma de fotos submarinas
para saber si alguna de las piedras del dique sumergido se
habían movido, circunstancia que, según Rañada, “no sería
determinante al tratarse de un dique del tipo Ahrens y no de
núcleo”. Sin embargo, para garantizar el buen servicio del
espigón, el servicio de Costas solicitó igualmente cuatro
pruebas de calado en distintos puntos estratégicos para
comprobar si el nivel de arena acumulada en el fondo había
aumentado. A principios de la próxima semana se conocerá el
resultado.
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