La mejora de la competitividad del comercio ceutí, uno de
los aspectos fundamentales por los que pasa la reactivación
del sector, cuenta como motor principal con la reforma del
IPSI. Esta reforma se sustenta en el prolijo informe (más de
300 folios) que la Confederación de Empresarios de Ceuta ha
redactado y que estudia de forma minuciosa el actual sistema
de tarifas reordenando los gravámenes de cada producto y
“procurando un reequilibrio entre las cargas a la
importación y las cargas a los servicios”. De esta forma, la
reducción “selectiva” de los tipos que se aplican a la
importación, se compensan con incrementos moderados en los
servicios.
La reforma del IPSI implica también la eliminación de la
doble imposición, “una característica del impuesto que le
resta eficacia y ecuanimidad, al tener que pagar dos veces,
por ejemplo, la compra de una pieza de recambio y el
servicio de su colocación”, según apunta el presidente de la
CECE, Rafael Montero Ávalos.
Por último se reclama la modificación del sistema de
gestión, permitiendo la liquidación del impuesto en el
momento en el que se materialice la venta de artículos. “La
reforma del IPSI en cualquiera de sus aspectos persigue la
recuperación de la competitividad, aunque esto no supone una
relajación. La pérdida de poder recaudatorio no puede
significar la dejadez ante las compensaciones del Estado.
Debemos buscar la autosuficiencia por honor”, explica el
portavoz de UGT, Antonio Gil.
Despacho de mercancías
La apertura en Algeciras de un Despacho de Mercancías para
Ceuta permitiría la devolución “excepcional” de mercancías
agilizando además los trámites aduaneros, una de las trabas
del comerciante ceutí.
|