Aunque estaba anunciado que ayer comenzara el intercambio de
billetes entre navieras, éste no estará operativo hasta
dentro de uno o dos días debido a cuestiones organizativas
de las tres compañías navieras que operan entre Ceuta y
Algeciras. Así lo anunció el diputado socialista por Cádiz y
portavoz de Infraestructuras en el Congreso, Salvador de la
Encina.
Con esta medida, afirmó, “Ceuta vuelve a recuperar la
posibilidad de que los pasajeros, cuando saquen sus billetes
de embarque, puedan utilizar cualquier naviera”. De este
modo, el Tribunal de Defensa de la Competencia atiende las
peticiones efectuadas por el PSOE y “reconoce que el paso de
llevar el asunto al Congreso fue fundamental”, explicó.
De la Encina dijo también que la intercambiabilidad, que
siempre ha estado vigente durante los meses que dura la
Operación Paso del Estrecho (OPE), es “una cuestión de
Estado porque embarcan millones de personas y miles de
coches y con esta medida se facilita el embarque porque, si
no, se crearía un colapso en Algeciras y en Ceuta de
incalculables consecuencias”.
Sin duda la gran novedad es que la intercambiabilidad, una
vez se ponga en marcha a lo largo de este fin de semana,
funcionará ininterrumpidamente entre todas las navieras que
operan a ambos lados del Estrecho hasta el 1 de junio del
2009 lo que garantiza al ciudadano que “va a haber
competencia entre las compañías y que ésta afectará a la
calidad del servicio, al precio y al horario de los ferrys”.
El Tribunal de Defensa de la Competencia emitirá cada año
una fiscalización con la situación y los efectos del acuerdo
autorizado.
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Desde septiembre un barco pernoctará aquí
En los próximos días se va a abrir
el pliego de condiciones para la concesión de la línea de
interés público marítima a la que optan las navieras
Balearia y Trasmediterránea. En un plazo aproximado de un
mes y medio se sabrá quién es la adjudicataria de la misma y
ésta comenzará a operar en septiembre.
Según ha asegurado Salvador de la Encina, la compañía que
finalmente obtenga la concesión tendrá la obligación
“inexcusable e ineludible” de que un barco de gran capacidad
pernocte todas las noches en la Ciudad Autónoma lo que dará
“seguridad al residente ante una posible emergencia”.
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