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El Consejo de Gobierno decidió ayer abrir el proceso de
alegaciones sobre el estudio de impacto medio ambiental de
actividades relacionadas con la crianza y el engorde del
mejillón. Le tocó a Mabel Deu explicar exíguamente el
proceso actual de un acto administrativo que avanza según
criterios y ritmo a la carta. Deu recordó que en Ceuta
operan dos empresas relacionadas con el cultivo del
mejillón, Atunasa que plantea la colocación de 180 bateas
así como Mejillones y Mariscos S.L. con un total de 150. “Lo
razonable es que se repartan equitativamente, dijo, pero lo
importante es que se abre el periodo de alegaciones para que
los usuarios que lo desean puedan manifestar sus
planteamientos”.
En cuanto a los trámites para la exposición pública,
‘Mejillones y Mariscos de Ceuta’ vio ralentizada en más de
treinta días su salida a exposición pública, desde la
entrega de su informe de impacto medio ambiental, en tanto
que ‘Atunasa’ lo logró en poco menos de una semana.
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