Concha Chapela ha vuelto a Ceuta. La artista local ofrece,
desde ayer y hasta el próximo día 20, en el museo del
Revellín, una muestra de cerámica que refleja toda una
trayectoria vital ligada a la expresión moldeadora desde su
taller del Aljarafe. Un amplio catálogo de reproducciones de
estrellas, azulejos catalanes, cerámicas murales, tinteros
con vistas de la Ciudad Autónoma o un mapa mundi de Al
Idrissi... detalles que dejan entrever una pasión por la
alfarería portuguesa y la Andalucía barroca; cerámica con
denominación de origen.
La característica más importante de su obra es la delicadeza
en su tratamiento. Equilibrio estético para moldear el
Revellín. Una obra que refleja una historia más allá de su
autora; la historia de su propia tierra natal. Así, el
grueso de sus cerámicas destilan el espíritu de la ‘perla
del Mediterráneo’. El puerto, las calles, el Atlántico, el
monte Hacho... Tantos lugares emblemáticos para hablar de
ellos con las manos que definen los objetos; las manos que
definen las direcciones de las cosas.
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