Mucho tendrá que mejorar el Málaga ‘B’ de Mario Husillos
para desenvolverse sin problemas en el grupo IV de la
Segunda División ‘B’.
Los malagueños empezaron la pretemporada el 17 de julio al
igual que el Ceuta y por ello no hay excusas para su mal
juego y desorientación. Pero al margen del poco empaque del
segundo equipo de La Rosaleda, el Ceuta ya ha mostrado
ciertas cosas interesantes.
Después de dos semanas de trabajo, los de Orúe han
demostrado que serán un conjunto muy difícil de batir. La
defensa tiene a hombres muy solidos y que dan seguridad al
equipo: Álex Hornillo (excepcional por lo alto), Dani Olsson
(muy férreo en la marca de la banda izquierda), Sandro o
Juanma son hombres expertos en los que se puede confiar.
El punto débil de los caballas está en las entradas por las
bandas, pero sobre todo en el enlace del centro del campo
con el ataque. Fue una pena que Diego Ramírez (que padece
una gastroenteritis) no pudiera jugar ayer, ya que es un
futbolista muy válido para las labores de hilvanamiento de
juego entre los medios y los puntas. El sábado tendrá su
oportunidad.
En la primera mitad Nacho Rilo y Krios no terminaron de
hacerse con el control de juego. En los segundos 45 minutos
Víctor Vía y José Carlos (un canterano que apuntó buenas
maneras) mejoraron el nivel del ex del Loja y el griego (eso
sí, como muy metido en el partido).
En la primera mitad el Ceuta tuvo dos ocasiones buenas que
no terminaron en gol, de la mano de Antony y Antonio Prieto.
En cuanto a los metas, Basauri resolvió su trabajo sin
complicaciones y Novoa no aseguró bien el balón en una falta
blanquiazul en el minuto 75.
Hubo más oportunidades para los ceutíes en la segunda parte.
La mejor jugada del duelo empezó en un taconazo de Diego
Herrera que recibió Mikel Amézaga, quien centró a media
altura para Sufian, que no supo salir airoso del uno contra
uno con el portero Manolo.
El gol llegó minutos después del descanso en una jugada por
la banda derecha que cabeceó Víctor Vía y que resolvió el
goleador Diego Herrera. El suramericano aportó dinamismo y
salidas a la media punta del Ceuta, se fajó y fue un
incordio para la línea defensiva de los de Husillos.
La sorpresa la dio el argentino Alejo Ocar. Este futbolista
está entrenado con la plantilla pero es extracomunitario y
no puede jugar de momento ni en tercera. Salió por José
Carlos en el 70 y a los pocos minutos hizo el 2-0 metiendo
la cuchara y batiendo así al guardavallas rival. Estuvo en
la cantera del Lanús, Banfield y Vélez y se afincó en España
hace tres años. De momento juega en el Torremolinos, pero en
cuanto solucione su doble nacionalidad, a buen seguro que
encontrará acomodo en categorías superiores a la primera
andaluza.
En definitiva, el Ceuta fue mejor que el caótico Málaga ‘B’,
que se vio superado en oficio y contundencia. El filial
apenas llegó a la meta del Ceuta con peligro real.
Por otro lado el Ceuta tendrá que mejorar en la conexión
entre la zona media y la punta de ataque aunque aún tienen
tiempo de solventar dichas carencias.
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