El presidente de la Ciudad Autónoma, Juan Jesús Vivas,
acudió ayer a la inauguración de las nuevas escaleras de
acceso a la playa de la Ribera, que vienen a sustituir,
junto a los dos nuevos accesos que se habilitarán tras la
reforma del litoral de Fuente Caballos, a las dos escaleras
que existen actualmente, accesos que se demolerán tras el
período estival. El presidente acudió de noche para observar
la iluminación que se incorpora a esta nueva entrada, que
además cuenta con dos muretes de hormigón que sobresalen del
alzado de la calle para que pueda ser una referencia de la
situación del acceso a la playa para el turista. Como
acabado, sobre el hormigón se ha incrustado una placa que
señaliza el nombre de la playa.
La obra consistió en la construcción de unas escaleras en
voladizo apoyadas sobre dos muros de hormigón visto, es
decir, sin recubrimiento. Las escaleras llevan una
barandilla de acero inoxidable, mármol negro en los peldaños
y en la meseta e iluminación indirecta, precisamente la que
se acercó a ver el presidente Vivas.
Concurso público
La obra, que contó con un presupuesto de 102.000 euros y fue
adjudicada mediante concurso público, se completó con un
lavapiés entre los dos muros de hormigón. Asimismo se aplicó
como acabado una capa de pintura que sirvió de refuerzo al
hormigón.
Antes del acabado, las escaleras fueron sometidas a una
prueba de carga, cuyo resultado, según el arquitecto
municipal y creador del diseño, Jorge Chaves, “fue por
encima de lo esperado”.
Espacio protegido
Este nuevo acceso, que sustituirá a las dos escaleras
existentes hasta el momento (que se demolerán cuando
finalice la obra), estará abierto al público a mediados del
mes de julio. Una de las razones de esta construcción,
además de que cumple con todas las normas de accesibilidad,
es la protección del baluarte de San Miguel, torreón donde
se encuentra el mirador y uno de los pasos a la playa de la
Ribera.
|