La Guardia Civil realizaba un doble descubrimiento en una
intervención llevada a cabo en el puerto de la Ciudad
Autónoma. Los agentes interceptaban en un primer momento un
total de 47 bloques de resina de hachís, que estaban ocultos
en el doble fondo de un vehículo, construido en el depósito
de gasolina. Por este delito se detenía a una ciudadana
residente en Madrid de 42 años de edad. La droga que se
incautó la Guardia Civil alcanzó un peso de casi 17
kilogramos.
Las placas de hachís fueron trasladadas a las dependencias
del Área de Sanidad de la Delegación de Gobierno de la
Ciudad para proceder a su análisis componencial. Ese el fue
el momento en el que los agentes de la Guardia Civil
descubrieron que en el interior de diez de los 47 bloques
incautados había oculta una cantidad considerable de
cocaína. El peso total de la sustancia decomisada supera los
doce kilogramos y su valor, una vez en el mercado negor,
asecendería a 400.000 euros.
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Transporte público sin autorización
La Policía Local han denunciado a
dos individuos que realizaban servicios de transporte
público sin ningún tipo de licencia en la Ciudad Autónoma.
Sobre las dos de la tarde, procedieron a denunciar a un
ciudadano ceutí que prestaba servicio entre la frontera del
Tarajal y la calle Independencia. Al ser preguntado el
pasajero, este dijo que le cobraba lo que quisiera darle.
Además, los agentes de la Policía Local procedieron a
denunciar a un segundo ciudadano ceutí al que se observaron
prestando un servicio irregular desde la frontera del
Tarajal hasta la calle Jáudenes, parando previamente en
diferentes lugares para recoger hasta tres clientes.
Los policías comprobaron cómo uno de los usuarios entregaba,
una vez finalizada la ‘carrera’ dinero al conductor del
vehículo por lo que procedieron a denunciarle. este último
individuo había sido amonestado anteriormente por el mismo
motivo.
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