La consejera de Sanidad y Bienestar Social, Yolanda Bel,
manifestó ayer que el primer caso de gripe aviar en Ceuta no
debe alarmar a los ciudadanos puesto que el ejemplar
afectado no era de consumo.
Bel aclaró que el Ministerio de Agricultura, Pesca y
Alimentación se encarga en estos momentos de tomar las
medidas correspondientes de prevención y que las
competencias de Sanidad se centran en realizar controles
exhaustivos. A pesar de ésto, la consejera señaló que el
Ministerio se comunicará próximamente con las comunidades
autónomas para exponer unas directrices sobre los protocolos
de seguridad que se deben seguir.
La consejera de Sanidad insistió en que los ceutíes no deben
alarmarse porque la Comunidad Autónoma está extremando los
análisis de aves con un incremento del muestreo. Asimismo,
la dirigente popular aconsejó a los ciudadanos que no toquen
a ningún ave que encuentren muerta o herida, ya que lo mejor
es avisar a las autoridades policiales o sanitarias.
La veterinaria de la Ciudad Autónoma, Begoña Rodero, explicó
al detalle las actuaciones que se están llevando a cabo en
Ceuta.
Los expertos realizan los análisis en las explotaciones
censadas cada quince días. Las palomas y las aves silvestres
no entran en el estudio a priori, ya que las primeras no se
contagian y las otras, sólo se estudian si son cazadas.
La veterinaria destacó la dificultad de controlar las zonas
de autoconsumo. Aunque matizó que en Ceuta se está logrando,
porque hasta la fecha las órdenes de confinamiento de aves
de corral se están acatando sin problemas. Rodero cree que
los casos de gripe aviar en África no están tan extendidos,
según la veterinaria la epidemia “no ha subido de Nigeria”.
La experta concluyó que en España se están tomando todas las
medidas que existen para prevenir la enfermedad y remitió a
la reunión Interministerial celebrada ayer.
Nuevas medidas
El Ministerio de Agricultura, las comunidades autónomas y
expertos en aves migratorias se reunirán mañana en el seno
del Comité Nacional de Sistemas de Alertas para unificar
criterios y, si llega el caso, tomar decisiones adicionales
frente a la epidemia.
El secretario de Estado de Comunicación, Fernando Moraleda,
reiteró ayer que el caso de gripe aviar se trata de un caso
aislado, sólo de ámbito veterinario y “no supone problema
alguno en materia de salud humana, de fronteras ni
vacunación”.
El portavoz gubernamental explicó que la cepa del ave
silvestre -un somormujo lavanco- hallado muerto el pasado 29
de junio en el Parque de Salburua (Vitoria), era igual que
la registrada en la República Checa y mantiene relaciones
con la que luego circuló por Grecia, Italia, Francia y
Alemania, donde se limitó al circuito de aves silvestres.
El periodo de incubación no pasa de los 21 días, y ya han
transcurrido 11. Este es el periodo tras el cual podrían
aparecer otros casos, si los hubiera, aunque normalmente se
espera el doble de días, es decir 42, se tendrá en cuenta
para cubrir la posibilidad de que hubiera algún animal no
localizado.
La otra hipótesis epidemiológica con la que Agricultura va a
trabajar es que viniera otra ave en un desplazamiento de
alguna zona de Europa y apareciera en cualquier sitio, pero
este sería entonces un foco primario y no tendría ninguna
relación con el caso actual.
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La epidemia se propaga por África
La Organización de Naciones Unidas
para la Agricultura y la Alimentación (FAO) considera que la
gripe aviar “representa una amenaza constante”. La epidemia
se logrado controlar en Europa occidental y el sudeste
asiático, excepto en Indonesia, pero sigue propagándose en
África. La FAO advierte de que existe el riesgo de que se
haga endémica en diversos países del continente africano.
Las dificultades para aplicar medidas de control adecuadas y
el pago de compensaciones a los campesinos hacen que el
comercio ilícito de aves de corral sea una realidad.
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