El senador del Partido Popular, Pedro Gordillo, comenzó su
comparecencia de ayer trasladando las críticas que, como
explicó, ha recibido de los profesionales del Hospital de
Ceuta.
Gordillo relató las diferentes denuncias a la “vergonzosa
gestión” del Gobierno del Estado en la Sanidad ceutí.
Según declaró, los profesionales no se quejan “porque tienen
miedo a represalias” y dijo, además, que trabajan “en
angustia”, 24 horas “sin tranquilidad”.
En la habitación 604 del Hospital civil hay “un nido de
paja”. La estancia se encuentra en el área de Maternidad de
este centro, lo que agrava la situación de denuncia
comentada por el senador.
También en Maternidad, aseguró, no hay toallas y “utilizan
las sábanas de cuna de los niños para secarse”. Sin embargo,
lo que puede parecer más serio es el hecho de que hayan
quitado el agua mineral, “que se usaba para los biberones de
los bebés” porque “dicen que gasta mucho”. En contrapartida,
se ha instalado un grifo en el centro de salud del que el
propio político dio fe a través de una foto que mostró a los
periodistas congregados.
El Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (INGESA), que
gestiona la Sanidad de las Ciudades Autónomas, ha recibido
diferentes denuncias respecto a estos temas, “pero no ha
hecho nada”.
Finalizada la evalución de los problemas del Hospital,
Gordillo subrayó, en alusión a Jesús Lopera, “que se dedicó
a contratar médicos que no eran médicos” y le pidió que
renuncie a la gestión de la Sanidad porque “cada día estamos
peor”. Según el senador, el Gobierno no se reponsabiliza de
la especialización de estos profesionales.
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