Con permiso de mi amigo y sin
embargo compañero, Manolo de la Torre, que sabe una jartá de
fútbol, servidor quiere decir algo sobre la selección
española y el papel realizado en el mundial de Alemania.
Manolo es amigo de Luis Aragonés o sea que lo conoce lo
suficiente, cómo para permitirse el lujo de hacer una
valoración, sobre el mismo, como seleccionador nacional.
Servidor, que no conoce de nada al seleccionador, juzgándole
como tal, personalmente y en persona, digo que su actuación
al frente del conjunto nacional ha sido un fracaso y que de
sabio poco, vamos nada de nada
Pues, bien, a pesar de su mala actuación al frente de la
selección, y de sus palabras que de no conseguir el objetivo
propuesto dejaría el cargo va a seguir, en el mismo, un par
de años más. Nada de extrañar en un país donde, en todos los
ordenes de la vida, los perdedores son encumbrados a los más
altos lugares y donde todos los que ostentan un
carguito,bien renumerado por cierto, caso del seleccionador,
acostumbran a decir donde dije digo,digo Diego, y se quedan
tan tranquilos y tan panchos, mientras siguen metiéndose sus
buenos dineros en sus bolsillos .
Luis no iba a ser, por lo visto, una excepción, ha olvidado
lo que dijo de abandonar la selección y se ha abonado a
seguir recibiendo pasta gansa porque, con la edad que tiene,
no le quedan muchas oportunidades de llevarse unos buenos
millones.
Aún cuando son muchos los redactores deportivos que les
echan todas culpas a cierto jugadores, nadie ha sido capaz
de decir la verdad y hacer cargar con las culpas, que buena
parte de ellas tiene el seleccionador.
Empezó mal al hacer aquellas declaraciones en las que dejó
claro quien iba a ser el portero titular de la selección,
mostrando cierto menosprecio hacia los otros dos compañeros
que, en realidad, son mejores que el titular. Un portero que
le han tirado cinco veces y le han metido cuatro goles
¡Menos mal que es el mejor del mundo!.
Contra Túnez, el seleccionador, ese que le dicen el sabio y
de sabio nada de nada, estuvo cuarenta y cinco minutos sin
enterarse de vía de agua que tenía en un lateral, por donde
entraba el defensa de Túnez como Pedro por su casa.
Oiga, un entrenador, de esa categoría que dicen que tiene,
debió ver lo que cualquier mediano aficionado, nos dimos
cuenta a los cinco minutos de iniciarse el enncuentro
.Por cierto, la suerte nos acompañó y se ganó el partido,
cuando el dos a cero se cantaba en cada arrancada, del
lateral de Túnez, por la vía que tenía abierta sin obstáculo
alguno
Contra Arabia Saudí un equipito de andar por casa, también
lo pasamos mal. Pero mire, usted, quedamos los primeros y se
nos vendió la moto de que éramos el no va más y que
jugábamos de cine ¡Pedazo de equipo que se iba a pasear en
el campeonato!.
Pero llegó Francia, un equipo del Imserso, como decían todos
esos grandes “genios” deportivos, con un Zidane que se
arrastraba por los campos, porque ya no era ni sombra de lo
que fue. ¡Santa Lucía les conserve la vista!.
Y de nuevo patinazo, del seleccionador nacional, a la hora
de hacer el equipo que debería enfrentarse a todos esos que
estaban acabados.
Puso en el centro del campo a unos “jugones” para
enfrentarse a Viera y Makelele que tardaron, escaso minutos
en “comerselos” y apoderarse del centro del campo mientras,
Zidan el acabado, según todos esos que lo más redondo que
han visto ha sido una pastilla de chocolate, se erigía en el
hombre que llevaría Francia al triunfo.
El centro del campo español, en su lucha contra el centro
del campo francés, era como David contra Goliat, sin onda y
sin piedra. Todos lo vimos menos el seleccionador nacional.
Si decía que los franceses, esos que nos íbamos a comer con
patatas fritas, eran unos hombres mayores y cansados, lo más
lógico es que hubiése sacado a dos extremos con la rápidez
de Joaquín y Reyes para desbordar a esa defensa, mientras en
el centro del campo, Xavi pedí a gritos que le cambiasen y
Alonso que tenía que enviar balones lagos a los extremos, se
veía impotente porque no había extremos
Cuando quiso cambiar ya era tarde, hizo entrar a Joaquín y a
Sena y el panorama cambio por completo, pero le faltó sacar
a Reyes ¿por qué a Reyes que siempre qué ha jugado ha
cumplido y bien, no le dio oportunidades manteniendo a Raúl
y haciendo jugar a Villa lejos del área donde es realmente
peligroso?.
¿Por qué no llevó un delantero nato, caso Morientes, por si
en determinado momento había que jugar a la heróica y se
llevó de veraneo a Marchena?.
Los jugadores, todos los que tuvieron minutos, dieron todo
lo que tenían, fracasó el planteamiento en cada encuentro y
el único responsable, de ello, no son los jugadores a los
que se quiere culpar, sino el seleccionador.
¡Y renueva par de años!
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