La solución para los barracones del Sardinero es su derribo.
Vivas ratificó este remedio para las naves del solar de la
zona centro de Ceuta. La Ciudad Autónoma, que mantiene
contactos con los propietarios (Borrás y Eroski) desde hace
varios meses, ha intentado agilizar los trámites de derrumbe
a través de informes elaborados por los técnicos
municipales. Ninguno ha cuajado: los edificios no están
tipificados como ruinosos y tampoco pueden tirarse por
cuestiones de salud pública, caminos que el Gobierno ha
intentado implementar. Por tanto, la solución que cobra más
fuerza en estos momentos pasaría porque los titulares de las
instalaciones costearan su derribo a través de un convenio
con la administración local. “Mientras tanto”, indicó el
jefe del Ejecutivo, “la Ciudad se encargará de la limpieza
de la zona”, un hecho que beneficia a los vecinos de la
zona, especialmente a los que viven en el Residencial La
Galera, que han manifestado su malestar por la situación en
multitud de ocasiones.
Mercado Central
En el ámbito de las infraestructuras, la ubicación del
Mercado Central todavía sigue sin estar clara. La Ciudad
baraja varias opciones aunque continúa con los estudios de
situación. Buscar espacio para los comerciantes durante la
reforma del actual Mercado es prácticamente imposible, ya
que tendría que ser en la zona centro, para compensar a los
titulares de los locales. Por lo tanto, Vivas reconvino que
la solución más práctica es concretar donde se levantará el
nuevo centro.
La Manzana del Revellín y la plaza Vieja-Patio Hachuel son
las posibilidades, aunque hasta dentro unos meses no se
conocerá el destino de los puestos del Mercado. Vivas
admitió que se trata de una cuestión “compleja” no exenta de
dificultades ya que, entre otras determinaciones, hay que
“satisfacer” a las familias, pequeñas empresas de autónomos
cuyos negocios reportan el grueso del sueldo mensual.
|