Este año no ha habido espera. Los ceutíes han hecho las
maletas casi el mismo día en que sus hijos han finalizado
las clases. El 16 de junio se produjo la primera gran huida
de la Ciudad Autónoma, ante todo pronóstico, en busca de la
costa, el Caribe e incluso los cruceros.
La travesía por el Mediterráneo ha sido una de las grandes
sorpresas del año. Crucero en familia. No es habitual que
los padres, hijos y abuelos opten por pasar sus vacaciones a
bordo de un crucero, sin embargo, en Ceuta ya hay varias
familias que eligen este plan.
El gerente de la agencia de viajes Trujillo, Manolo Cantero,
señala algunos motivos por los que grupos numerosos se
animan. El descuento puede ser de hasta un 20 por ciento “si
lo compras en enero”, recuerda.
La segunda novedad del año, según Cantero , es la de salir
“con críos al Caribe”. Es una alternativa aunque no se
impone, por el momento, como destino preferido para padres
con hijos.
“Las familias se van a la costa del Levante, Benidorm e
incluso Tarragona, por los parques temáticos”, subraya el
vendedor.
Un apartamento en la costa, con piscina y posibilidad de
montar en grandes atracciones a menos de una hora en coche
suple las necesidades de todo el grupo.
Sin embargo, hay quien prefiere la calma de llegar a casa. A
la península. Muchos militares aprovechan el período estival
para ver a los suyos.
Algunos ciudadanos de Ceuta cruzan el Estrecho hacia
territorio peninsular mientras los habitantes de
determinadas comunidades optan por la Ciudad Autónoma.
Desde hace un par de años, la ocupación hotelera de Ceuta
durante los meses de julio y agosto se mantiene entre el 60
y el 70 por ciento,“los fines de semana los hoteles están al
100 por cien”, informa Manolo Cantero. “Para venir a Ceuta
en Agosto hay que reservar ya”, recuerda.
Las compañías de bajo coste y otras ofertas baratas de las
que podemos encontrar por Internet no afectan a las agencias
de la Ciudad. El perfil del ceutí que sale de vacaciones
suele ser “reacio” a este tipo de empresas y prefiere acudir
a la agencia del barrio.
A juicio del co-propietario de la agencia Trujillo, esta
opción puede deberse a los problemas de seguridad que
entraña dejar el número de la Visa en la red. En cualquier
caso, añade, siempre hay un joven aventurero que se
pregunta: “Con diez euros, ¿me tomo un café o me voy a
Dublín?”
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