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El Delegado del Gobierno, Jenaro García-Arreciado, realizó,
ayer, su primera visita a las instalaciones del Centro de
Estancia Temporal de Ceuta (CETI) con la intención de
conocer el trabajo conjunto que los profesionales y el
director llevan diariamente a cabo. Antes de iniciar el
recorrido, se detuvo unos instantes para comentar las
primeras nociones que tenía del inmueble, y resaltó, por
encima de todo, que el CETI está “reconocido” por
instituciones mundiales que valoran su modelo de
organización como un sistema “a exportar” caracterizado por
una atención “integral” a la recepción humana.
Entre los valores más trascendentes, destacó las actividades
de carácter escolar, la asistencia médico-sanitaria y el
“profundo” respeto con el que se trata a los inmigrantes que
arriban al CETI; “el orgullo de Ceuta”.
El índice de ocupación actual ronda alrededor de las 400
personas, cifra que, a juicio de García-Arreciado, indica
que el centro está “bastante” lleno, pero, “si fuese
necesario”, aún quedaría espacio para admitir más personas.
Marruecos
Ante la posibilidad de reunirse con autoridades
marroquíes, el Delegado del Gobierno reconoció que es un
tema que tiene “en cartera”, pero se trata de una iniciativa
en la que debe de contar con el Ministerio de Asuntos
Exteriores. Un asunto “importante” que recuerda que la
“verdadera” valla es la “excelente relación con Marruecos,
país con el que tiene pleno interés en “cuidar” las
relaciones político-estratégicas que le unen a España y, más
especialmente, a la Ciudad Autónoma.
García-Arreciado tiene un proyecto en mente que podría
materializar tras informar a Exteriores.
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