El Centro de estancia temporal de inmigrantes (CETI) de la
Ciudad Autónoma de Ceuta, ha vuelto estos últimos días a
alcanzar cifras muy cercanas a su capacidad máxima, al
encontrarse el recinto por encima de los 500 extranjeros, la
mayoría de ellos subsaharianos, asiáticos y argelinos.
Según fuentes de la Delegación del Gobierno se encuentra
cerca de alcanzar sus 512 plazas de capacidad máxima de las
que dispone el CETI, debido a las entradas producidas
durante los últimos días, sobre todo de inmigrantes
asiáticos.
Desde la Delegación del Gobierno se ha señalado que se ha
producido un pequeño “goteo” con la llegada al CETI de
inmigrantes de Bangladesh y de la India, los cuales han
entrado principalmente por la vía marítima o bien por la
aduana del Tarajal.
El elevado número de personas con los que ha tenido que
hacer frente el CETI estos últimos días, no ha motivado que
se tenga que adoptar ninguna medida extraordinaria, ya que
el recinto está preparado para atender ese volumen de
ocupación.
Situación controlada
La Delegación del Gobierno en Ceuta afirmó que la situación
de la inmigración irregular en la ciudad está en unos
límites “controlables”, aunque se están produciendo entradas
irregulares por pequeños grupos de asiáticos.
El delegado de Gobierno, Jerónimo Nieto, señaló que “el
perímetro fronterizo con Marruecos está tranquilísimo porque
allí los controles impiden que pase nadie, pero si tenemos
un pequeño goteo constante de inmigrantes asiáticos,
subsaharianos y argelinos por otras vías, bien por la
marítima o por la aduana”.
No obstante desde la Delegación se reconoce que “ la actual
situación es tolerable porque el CETI, está descargado de la
presión a la que estaba sometida antes, aunque está
practicamente lleno”.
Sirga tridimensional
En relación a la colocación de la sirga tridimensional en el
vallado fronterizo que delimita a Ceuta de Marruecos,
Jerónimo Nieto, explicó que “aún no hay una información
directa desde el Ministerio del Interior y no sabemos
exactamente como transcurrirá este asunto, pero se ha de
tener en cuenta de que la situación del perímetro fronterizo
es muy diferente en Ceuta y en Melilla dado que en Ceuta el
terreno es mucho más abrupto”.
La sirga tridimensional se construirá finalmente en el
espacio de alrededor de dos metros que se encuentra entre
las dos vallas de la zona fronteriza, en lugar de
precediendo a la primera , donde se encontraban los
inmigrantes, que en un principio iba a ser la ubicación
original de la sirga, pero Marruecos lo reclamó como suyo.
El Ministerio del Interior explicó que la ubicación final de
la sirga se debía al informe de la empresa adjudicataria,
Indra, según el cual “los objetivos se asegurarían
ubicándola entre las dos vallas”.
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