SOCIEDAD - JUEVES 9 DE FEBRERO DE 2006

José Luis Navazo
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El pasado lunes en el centro de Tetuán y el martes 7 en el antiguo Río Martín cientos de ciudadanos, encabezados por las formaciones islamistas, se manifestaron contra la publicación de las viñetas alusivas a Mahoma reproducidas en varios medios europeos euirope

Noticia = Hasta el denostado presidente Bush (fundamentalista cristiano al fin y al cabo) mostró su repulsa. Es muy posible que debamos revisar los límites (para todos) de la libertad de expresión, sin renunciar en absoluto a ella. En cualquier caso hay muchas cosas que matizar, como el que la “guerra de las viñetas” estalle precisamente ahora, con la República Islámica de Irán (implicada, desde su fundación, en numerosos actos de terrorismo) puesta contra las cuerdas por la comunidad internacional.

En cualquier caso el resultado es el que es: el mundo islámico, por lo demás hábilmente manipulado, se revuelve por lo que considera una gravísima ofensa. Yo, que los conozco bien e incluso diría que íntimamente, los comprendo en parte. Para que el lector me entienda: es como mentarle a uno la madre. O peor. En todo caso y en un país civilizado ahí están los tribunales. Pero la cultura musulmana no lo ve así. Hay numerosos precedentes de injurias, gravísimas, al mundo cristiano o judío. Pero yo no veo a judíos o cristianos asaltando embajadas o amenazando a pacíficos y tolerantes ciudadanos por el mero hecho, por ejemplo, de ser daneses o noruegos. Claro, los musulmanes son diferentes, Como tampoco veo a la emigración negra, latinoamericana o polaca quemando coches y destrozando barrios. Pero claro, los hijos de la inmigración musulmana son, también, distintos ¡Vaya por Alá! (quiero decir por Dios, que es lo mismo).

Aquí al lado, cruzado el Tarajal, también se han vivido movilizaciones. Más agitada la de Tetuán, más sosegada la de Martil. Bueno, sí, con quemas de banderas... lo que, para mí que la llevo dentro, es un insulto para todos, absolutamente todos, los nacionales de las mismas. Las banderas, todas, merecen un respeto. Como las madres. Como los profetas. Como las opiniones pacíficamente expuestas.

La “manifa” de Tetuán fue organizada, al alimón, por la formación parlamentaria islamista PJD (“Partido de la Justicia y el Desarrollo”) y otros cuatro organizaciones afines, así como por la alegal pero consentida organización del mítico jeque Yasin, “Justicia y Espiritalidad”, formidable movimiento islamista cohesionado y disciplinado, el más influyente de todo el Magreb. Y allí estaban, en cabeza y sacando pecho, sus respectivos líderes regionales: el diputado por Tetuán, Boukhoubza y el “emir” regional de “Justicia y Espiritualidad”, el exprofesor de inglés Issa Acharki. La “sentada” de Martil fue, digamos, más familiar, entre vecinos y convocada por todo tipo de asociaciones y partidos presentes en la villa.

Para mañana viernes está convocada, en Rabat, una multitudinaria manifestación para “denunciar la publicación por un diario danés, reproducida por ciertos medios occidentales, de caricaturas que atentan contra la persona del profeta Mahoma y que constituyen un ataque contra los valores y símbolos sagrados de la (sic) nación islámica” que se sumará a las que, desde hace días, se vienen organizando a lo largo y ancho del país: en Casablanca, Rabat, Tetuán... Y lo que queda.

Diferentes interlocutores y líderes de formaciones políticas e islamistas del vecino país, consultados “in situ” por EL PUEBLO, reconocen una cosa: en cualquier momento la situación puede írseles de las manos. Mientras tanto la MAP (Magreb Arabe Press), la agencia oficial marroquí, guarda un pudoroso y cómplice silencio ante éstas manifestaciones quizás para no dañar, más aun, la imagen de un bello país puesto, lamentablemente y por causa de su clase dirigente, bastante en entredicho.

Colosos de Bamiyán

Pese a la presión de la UNESCO y de algunas personalidasdes musulmanas, los “talibanes” afganos volaron en marzo de 2001 las gigantescas estatuas de unos Budas milenarios... sin que la “Umma” dijera ni pío. ¿Qué ocurriría si algún grupo decidiera atentar contra cualquier monumento del arte islámico...?.
 

Las desafortunadas viñetas son la disculpa, pero el problema es otro

La tolerante y acogedora sociedad danesa, fuertemente comprometida a nivel presupuestario en la integración de los inmigrantes (como el conjunto de las sociedades occidentales, España entre ellas), se ha visto abruptamente sacudida en su buena fe, como advierte la ministra Rikke Hvilshoj: “Les hemos dado educación, trabajo y no es suficiente. ¿Qué más podemos hacer?”.

Occidente, amenazado por un terrorismo islamista con el que -no nos engañemos- simpatizan un buen número de musulmanes, debe hacer un difícil ejercicio de equilibrio y separar entre “los buenos y los malos”. Porque, atención, musulmanes son todos: desde un tolerante ulema o un pacífico místico sufí a un terrorista adscrito al salafismo yihadista bajo cobertura teórica (salvo el de orígen shií) del despreciable wahabismo. Pero ellos, los musulmanes, la “umma” en su conjunto, suelen hacer un “totum revolotum” y, mezclando churras con merinas, apuntar al conjunto de los países y ciudadanos occidentales intentando desestabilizarlos: el primer paso es la “invasión silenciosa”, el segundo la “islamización”. La concrección de espacios islámicos (enseñanza, barrios...) es el actual frente de batalla. Y, en retaguardia, el chantaje del petróleo. Parece ser que el fin de los “rumi” (nosotros, los occidentales) ya está previsto en el sagrado Corán (hay aleyas de claro sabor escatológico) precisamente para los tiempos que corren. Vistas así las cosas, ¿por qué no darle un “empujoncito” al corrupto y decadente Occidente...?

Tras el atentado de Marrakech (hotel “Atlas-Asni”, 24 de agosto de 1994, dos ciudadanos españoles asesinados) , Rabat expulsó a miles de ciudadanos argelinos residentes en el país... ¿Qué hubiera pensado el Comendador de los Creyentes si, tras el brutal atentado del 11-M, España hubiera “devuelto” a los más de ochocientos mil marroquíes, con papeles y sin ellos, a su país de procedencia...?

También llama la atención que, de forma indecorosa, el Islam en su conjunto permita las amenazas de genocidio perpetradas por el actual presidente de Irán, las difíciles condiciones en las que vive la población no musulmana en países bajo control áraboislámico en los que -en unos más, en otros menos- se conculcan de hecho y de derecho los principios más básicos (libertad de pensamiento y religión) de la Carta Universal de los Derechos Humanos. La “umma”, ducha en exigir, desconoce la palabra reciprocidad. “Chuma”.

Sí, las viñetas son lamentables, comparto el enfado de los musulmanes...., pero éstas no son formas admisibles ni en el fondo ni en la forma. No es de recibo. ¿De qué “tolerancia” habla el Islam cuando éste vocablo es él el primero en no aceptarlo?. Basta de ingenuidades.

“Suerte”. Es lo que yo les deseo a los futuros candidatos musulmanes (magrebíes o no) a la emigración cuando, en los próximos tiempos, soliciten un visado para buscar trabajo en Dinamarca o en otras países del Viejo Continente.

La actual “guerra de las viñetas” sumada a Nueva York (11-S), Madrid (11-M), Londres (7-J) o la reciente “intifada” francesa está marcando un antes y un después. “Alea jacta est”. Europa, la vieja Europa, parece que está -”chuia, chuia”- empezando a despertar ...