Mientras Europa lleva veinte años celebrando Olimpiadas de
Biología, en España, el número de licenciados está
disminuyendo de forma alarmante. Ante este panorama tan poco
halagüeño, los profesores de las ramas científicas de todo
el país han decidido poner en marcha la primera Olimpiada
nacional de Biología . Ayer se celebró, en la Ciudad
Autónoma, la competición local con un gran éxito de
participación, 50 alumnos de primero y segundo de
bachillerato de todos los institutos ceutíes.
El Abyla acogió, por un par de horas, a los jóvenes
estudiantes que, a pesar del ‘madrugón’- de 10 a 12,15
horas, aseguraron que fue una gran experiencia. “Nuestro
objetivo primordial es desarrollar vocaciones” en los
futuros universitarios. “Que demuestren interés e ilusión,
que tengan curiosidad por aprender”, explica el organizador
de la Olimpiada ceutí y catedrático de Biología, Adrían
Ruiz.
No es un exámen
Ruiz señala que la acogida local ha sido “asombrosa”. El
conjunto de profesores que han elaborado la prueba teórica,
“que no examen”, se muestran satisfechos de la respuesta
juvenil. Ninguno esperaba a tantos adolescentes a primera
hora de un sábado, “es una señal de que no está todo perdido
con la biología en nuestro país”, valora.Después de la
Olimpiada, los alumnos recibieron unos obsequios (cuaderno y
bolígrafo), así como un refrigerio en forma de zumo “para
que recuperasen energías”, bromeaba Ruiz. Y es que
incentivar a los estudiantes de hoy es formar a adultos
versátiles y conocedores del mundo que les rodeará mañana.
A Buenos Aires...
La iniciativa española nace en Gran Canaria y es ahí donde
tendrá lugar, los días 24 y 25 de marzo, la fase nacional
del certamen. Según Ruiz, “no se trata de que participen
alumnos superdotados, lo más importante es que disfruten de
esta asignatura concreta y de las ciencias en general”. El
nombre de los ganadores locales se comunicará el 4 de
febrero y disfrutarán de cinco días pagados en la isla
mediterránea. Los primeros en la Olimpiada nacional viajarán
hasta Buenos Aires para celebrar el encuentro internacional
, “merece la pena, ¿verdad?”.
La actividad pionera en España ya ha confirmado su
continuidad.
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Medicina tiene más salida que Biología
Los bancos interiores del
instituto Abyla estaban particularmente llenos de
adolescentes para ser un sábado. “Quería vivir la
experiencia, no me ha importado madrugar”, comentaba Desireé,
estudiante de primero de Bachillerato. “Ha sido más fácil de
lo que esperaba, el año que viene no me importaría repetir”,
decía Asma. A María José también le ha gustado la prueba,
pero no estudiaría Biología. “Prefiero la Medicina, me han
dicho que tiene más salida”. Desirée tampoco, quiere ser
pediatra. Quizás la Olimpiada haya despertado alguna
vocación.
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