“Ceuta es una zona potencialmente apta para el miticultivo”,
así se desprende del informe de Ecología Marina para el
cultivo sostenible que desarrolló el biólogo ceutí Oscar
Ocaña.
Las aguas ceutíes, que se encuentran en fase de catalogación
por la consejería de Medio Ambiente, apuntan a que son de la
mayor calidad existentes en el catálogo. De hecho serán del
Grupo A dada su limpieza, sus corrientes (caliente del
Mediterráneo y fría del Atlántico) que convergen en la zona
costera ceutí enriqueciendo por sí mismas y de modo natural
la amplia fauna marina, favoreciendo además todos los
ecosistemas en su crecimiento y desarrollo.
Por todo ello, y dado que el impacto medio ambiental está
siendo perfectamente estudiado, analizado no sólo por las
mejores fundaciones dedicadas al estudio del medio ambiente,
sino -de añadido- por las propias administraciones que son
las garantes de que ello sea así, se llega a la conclusión
final de que potencialmente Ceuta ofrcerá un mejillón de
alta calidad (superior al gallego).
En Galicia, casi 4.000 bateas se hallan diseminadas por los
recodos geográficos de sus famosas rías (las imágenes son
realmente ilustrativas). Unas rías cuyas aguas cerradas
donde las corrientes no baten y, por tanto, no cuentan con
la excelencia de las de Ceuta, son inferiores a las ceutíes.
Las gallegas son aguas catalogadas, en su mayoría, del Grupo
B. Pues bien, los ecosistemas marinos no sólo no han sufrido
variaciones perceptibles, sino que de modo paralelo se ha
ampliado la fauna de nécoras y pulpos, lo que generó (desde
hace 40 años) una sub-industria “pulpeira” y de nécora de
elevada importancia reconocida tanto nacional como
internacionalmente.
Los biólogos y técnicos consultados admiten el hecho de que
en las aguas costeras de Ceuta resultará aún menos
perceptible una incidencia en la fauna y en los ecosistemas,
ante el hecho de la instalación de un parque de bateas
superior al centenar, dada la ubicación estratégica en zona
de fuertes corrientes depuradoras y con una climatología,
además, que en nada tiene que ver con la gallega, donde -a
priori- las condiciones podrían estimarse como de peores.
Aún así, como se aprecian en las instantáneas tomadas ‘vía
satélite’ la masificación de bateas gallegas en torno a la
geografía costera es realmente llamativa, contribuyendo a
que, socioeconómicamente hablando, la zona haya logrado
enriquecerse como para elevar la calidad de vida de cuantos
habitan las rías . Precisamente por el alto grado de
recursos pesqueros y marisqueros que se ha generado. La
industria ha sabido conjugar, a la perfección,
sostenibilidad y desarrollo habiendo empleado -para ello-
nada menos que un parque cercano a las 4.000 bateas.
Proyectos pilotos
En Ceuta, las dos propuestas para proyectos pilotos han sido
excepcionalmente acogidas por las autoridades. Ambas
administraciones conjugan sus esfuerzos en la idea de que
los recursos marinos puedan adquirir una nueva dimensión que
dote o permita el trabajo directo de los hombres del mar en
nuestra ciudad, con una readaptación de la flota al nuevo
escenario propuesto que dé vida a un sector en permanente
estado de crisis desde hace algunas décadas.
Se trata de una excelente oportunidad para que las dos
empresas logren los objetivos. Así lo han visto las
administraciones públicas, así lo apoyan y, no obstante
ello, así se erigirán en garantes pero favorecedores de que
se cumplan permanentemente los objetivos marcados por la ley
en todos sus ámbitos de competencia respecto de la industria
en ciernes.
Dos empresas pioneras
En la actualidad ya existen dos empresarios que se enfrentan
al enorme reto estratégico, no ya sólo de producir el
mejillón, sino de crear las bases para que este bivalvo sea
diferente y de mejor calidad que los que actualmente se
encuentran en el mercado.
Habría que aunar esfuerzos de cara a lograr y consolidar que
la industria se establezca en la ciudad desde donde poder
exportar un producto de calidad, con denominación de orígen,
y que a partir de él puedan establecerse sub-industrias de
manufactura.
Para que el producto pueda competir en el mercado necesita
una amplia cosecha -en miles de toneladas- y sin que, por
ello, suponga menoscabo al medio ambiente. De lo que logren
las dos empresas, se beneficiará el conjunto de Ceuta.
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Galicia
La primera industria marisquera
del país en el mejillón, nécora, pulpo... Casi 4.000 bateas
para el cultivo del mejillón circundan la geografía costera
de sus rías. El medio ambiente marino no sólo no ha padecido
sino que se ha enriquecido. Cosechan más de 360.000
toneladas/año
Ceuta
Mejor agua que las gallegas, el número de las bateas para
sus parques deben conjugar la siembra de un mejillón de
calidad con el volúmen necesario para que produzca un serio
’impacto’ en el mercado mejillonero tanto nacional como
internacional. El proyecto piloto dotará de una primera
cosecha cercana a las 500 toneladas. Si la evolución es
favorable como todo apunta, se debe llegar, al menos, a las
20.000 tns por cosecha.
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