De la mente del secretario general del sindicato Unión
General de Trabajadores de Ceuta, Antonio Gil (Ceuta, 1954)
surgió una idea que puede cambiar el panorama del transporte
de mercancías en Ceuta. Si finalmente sale adelante, el
denominado ‘coste cero’ para el transporte de mercancías,
puede repercutir en la bonanza económica y social de Ceuta.
La propuesta emergió en el panorama político un día
informativamente caliente, el de la manifestación de la FPAV
contra los precios de las navieras. Rápidamente tanto la
Ciudad como un partido político de la oposición, como es el
caso de la Unión Democráta Ceutí (UDCE) tomaron buena nota
de esta idea. Los primeros han elevado la propuesta a su
órgano consultivo, el Consejo Económico y Social para que
estudie su viabilidad mientras que los segundos anunciaron
la incorporación de la medida a su programa electoral.
La propuesta de ‘coste cero’ para el transporte de
mercancías desde la península hasta Ceuta está de actualidad
ya que la Ciudad anunció hace unas semanas su intención de
elevar al Consejo Económico y Social la medida para que este
ente determinara la viabilidad de la misma. Finalmente, y
como confirmó el mismo, el documento con la propuesta llegó
a instancias del CES que ya ha anunciado su intención de
comenzar los trabajos a mediados de la próxima semana.
¿Cuáles son las líneas generales que fundamentan esta
medida?
La idea es que cualquier rebaja en el coste del transporte
marítimo podría generar un beneficioso efecto en cadena.
Hemos cifrado el gasto anual en transporte marítimo de
mercancías en ocho millones de euros, una cantidad que en un
principio debería ser subvencionada por la Ciudad Autónoma a
través de un convenio con los empresarios. La medida
repercutiría en todos: el comerciante baja los precios y se
hace más competitivo, el consumo interno aumenta y las
exportaciones se incrementan considerablemente.
¿Cómo se siente uno al saber que ha ‘parido’ una idea que
puede cambiar tantas cosas?
No quiero ponerme en el centro de los elogios. Si todo
saliera bien nos cabría la satisfacción de haber hecho una
propuesta que fuera útil para la ciudadanía y el comercio.
Es lo único. Yo ya le dije al presidente de la Ciudad cuando
le presenté la propuesta al igual que a los empresarios que
no queríamos ningún protagonismo, lo que hacíamos era poner
encima de la mesa una idea que nos parecía buena. De ahí que
sean otros los que estudien su viabilidad y la pongan en
marcha si lo consideran oportuno.
A su juicio y sin haber hecho los estudios económicos,
jurídicos y administrativos oportunos ¿Es una propuesta
viable?
A priori, yo entiendo que sí en el sentido en que la
subvención sólo sería necesaria en un primer momento ya que
con el tiempo la propia recaudación del IPSI costearía los
gastos de forma que el sistema acabaría autofinanciándose.
¿Qué consecuencias puede tener el resultado del estudio
encargado por la Ciudad?
En el caso de que haya un atisbo de viabilidad del proyecto
tendríamos una posibilidad de exigirle al Estado que fuera
solidario y ayudara a compensar los gastos que genera en
primera instancia esta medida. Adelanto que el papel de los
servicios jurídicos no será fácil ya que tendrán que
dilucidar el encaje legal que esta medida tiene.
¿Planteó la cuestión a algún representante de Delegación
del Gobierno?
El ámbito de trabajo de este acuerdo es el de los
comerciantes y la Ciudad. Es cierto que incluir en el
acuerdo a la Delegación de Gobierno dada la situación de pre-campaña
podría generar resultados distintos a los pretendidos.
Además se quería evitar la tentación de que el Gobierno de
la nación adoptara esta medida al ser más efectiva que lo
que le costaría la bonificación del 40% a la cuota de la
Seguridad Social. La idea es simplemente acabar con la
tentación que pueda tener el gobierno de decir esta me gusta
más, es más barata y más eficaz y me cargo la otra.
Cambiando de tercio ¿Ve cercano la definitiva
implantación de la intercambiabilidad?
Tras la salida del interlineado de Acciona y Euroferrys
parecía el final de esta cuestión, ahora ha vuelto a
establecerse pero sólo para dos navieras. En definitiva
pienso que son empresas privadas y son las que tienen la
potestad de hacer el intercambio o no. Como ciudadano lo
ideal sería que se restableciera pero comprendo las reservas
que existen para poner en práctica la intercambiabilidad de
nuevo.
¿Las ofertas pueden hacer las veces del intercambio?
Las ofertas son buenas. Evidentemente abaratan el coste pero
no benefician la llegada de potenciales clientes y turistas.
El transporte es caro y eso impide un turismo más fluido
hacia Ceuta. Turísticamente hablando un transporte más
barato también sería bueno. Habría que actuar sobre ese
asunto porque el transporte marítimo es una barrera para
Ceuta en todos los sentidos ya que es a mi juicio
excesivamente caro.
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