El informe anual de Amnistía Internacional ofrece una
síntesis sobre los principales problemas de España respecto
a la vulneración de Derechos Humanos. La organización
denuncia concretamente los “homicidios y malos tratos de
migrantes”, denuncian que “las personas que huían de la
violencia, la injusticia y las privaciones y que lograban
cruzaban las fronteras meridionales de España en el norte de
África, las islas Canarias y Andalucía siguieron
encontrándose con obstáculos a la hora de acceder a los
procedimientos de asilo”.
AI asegura en su informe que se negaba a los solicitantes de
asilo la orientación y el apoyo jurídico necesarios. “En
Ceuta y Melilla, los migrantes permanecían recluidos en
centros de internamiento masificados y muchos fueron
devueltos ilegalmente a Marruecos”. Asimismo, hace hincapié
en que el acoso a migrantes en campos no oficiales de
Marruecos y las medidas adoptadas para elevar las vallas que
rodean Ceuta y Melilla “dieron lugar desde finales de agosto
de 2005 a intentos en masa de cruzar la frontera hasta
territorio español. Amnistía ha registrado la muerte de 13
migrantes y decenas de heridos, muchos de ellos, según
informes, por el uso excesivo de la fuerza o de los malos
tratos por parte de los cuerpos de seguridad españoles y
marroquíes. A pesar de la investigación conjunta que se
anunció desde el Estado español.
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