Agentes de la Policía Local
realizaron, el martes y ayer jueves, en la calle Fructuoso
Muaja y en el Poblado Marinero, respectivamente, dos
detenciones de sendos individuos por atentar contra su
autoridad. En el primer caso, se trataba de una persona que
amenazó al dueño de un local que se encontraba en obras por
reformas y en el segundo incidente, el individuo se hallaba
en el suelo con fuertes convulsiones y cuando fue atendido
por los agentes, respondió de manera agresiva.
A las 19,30 horas del martes, día 5, mientras dos agentes de
la Policía Local se encontraban de patrulla por la calle
Fructuoso Miaja, recibieron la solicitud de auxilio del
propietario de un local que se encontraba de reforma después
de que un individuo le exigiese que le hiciera un tatuaje.
Al informarle de que su establecimiento no estaba abierto al
público, comenzó a recibir insultos y amenazas del
desconocido.
Tras avisar a la Local, el individuo se dio a la fuga, pero,
tras realizar una batida, fue hallado en las proximidades de
la tienda. En el momento en que los agentes le solicitaron
su documentación, éste se negó y intentó golpear a uno de
los agentes con una mochila que sostenía en su mano derecha.
Posteriormente fue reducido por otro de los agentes y
trasladado al hospital Ingesa para ser asistido por un
facultativo.
Poblado
A las 4 horas de ayer, el 092 informa a dos agentes de la
existencia de un individuo con convulsiones que se
encontraba tumbada en el Poblado Marinero. Una vez en el
lugar, se identifica una persona que había estado
discutiendo con el citado individuo, cuando se acercan a
comprobar su situación, muestra una actitud pasiva.
El individuo no portaba ningún tipo de documentación en el
interior de los bolsillos y al indicarle que guardase el
resto de sus pertenencias, éste comenzó a hablar de forma
despectiva y agresiva a los agentes hasta propinar un golpe
a la altura del pecho a uno de los policías.
Acto seguido, fue trasladado a las dependencias habituales,
no sin antes golpearse contra la mampara de protección e
insultar nuevamente a los agentes. |