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Durante estos últimos días pasados hemos ido recopilando
datos e información respecto de todas las obras escultóricas
que Ginés Serrán ha llevado a cabo para el mejor
conocimiento de la antigüedad representada por grandes
genios, geógrafos y pensadores (Al-Idrissi, Ibn Aknin,
Estrabón y Pomponio Mela) relacionados con nuestra Ciudad
Autónoma y otros de reconocido prestigio mundial por lo que
a sus conocimientos y enseñanzas se refiere: Aristóteles,
Homero, Mahatma Ghandi y Enrique “El Navegante”. Solo nos
faltaba reseñar las dos “Columnas de Hércules”: Abyla-Ceuta
y Calpe-Gibraltar y “Hércules uniendo las dos Columnas”: La
Unión del Mundo como así las ha denominado el autor que
“coronaran, a partir del próximo septiembre, los morros de
la bocana (Alfau y Puntilla, respectivamente)”.
De Hércules, nombre mitológico, semidiós, hijo de Júpiter y
Alcmena, según hemos podido recopilar de la bibliografía
consultada, sabemos que nació en Tirinto, Beocia, en el
siglo XIV a.C. Que en poco tiempo adquirió corpulencia y
fuerza extraordinarias y se hizo célebre por sus
innumerables hazañas maravillosas, entre las que destacan
los doce trabajos que para purificarse le encomendó Euristeo,
rey del Peloponeso. Igualmente cuenta la fábula que Hércules
separó Europa de África y comunicó el Mediterráneo con el
Atlántico, en memoria de cuyo hecho se colocaron dos
columnas en dos montes situados en el Norte del Estrecho y
otro al Sur, Yebel Tarik o Gibraltar y Abyla o Ceuta.
Según el autor árabe Masoudi, (siglo X a.C), unos faros de
cobre y piedra habían sido constreñidos por Hércules en el
Estrecho de Gibraltar, que tenían unas inscripciones y unas
estatuas que señalaban con sus manos que era imposible
adentrarse más allá. En la “Geografía” de Estrabón se indica
que se trataba de unos pilares de bronce que formaron parte
de un templo, lugar de peregrinaje donde se hacían
sacrificios en agradecimiento por una navegación llevada a
feliz término.
Luego de muerto, Hércules fue admitido en el Olimpo, ciudad
de la antigua Grecia en la Península del Peloponeso donde
radicaba el santuario principal del mundo griego dedicado a
Zeus (Júpiter), considerado generalmente por los mitólogos
como dios del cielo y de los fenómenos celestes, y allí
tenían lugar los famosos Juegos Olímpicos, donde se casó con
Hebe, diosa de la Juventud.
Ni que decir tiene que las obras de Gines Serrán, llenas de
simbolismo y exponentes de una Cultura Universal, tanto las
que irán ubicadas en zonas concurridas como las situadas en
la bocana del Puerto, nos ofrecerán a residentes y
visitantes en general unas imágenes de Ceuta milenaria que
realzaran su entorno y darán una nota de cultura de la que,
además, con los exponentes que la representan realizados por
este artista ceutí, se ha logrado, según su autor, un
paralelismo objetivo entre la larga lista de culturas que
han pasado y han hecho histórica nuestra Ciudad Autónoma.
No seríamos, por último, ecuánimes ni justos si no
expresáramos nuestro reconocimiento y felicitación más
efusiva al ejecutor de estas obras que quedará para siempre
en los anales de la cultura ceutí por lo que, haciendo
alusión al adagio popular “por sus obras le conoceréis”
creemos que es obligado incluir en el catálogo de hijos
ilustres de Ceuta, de hoy en adelante, al artista local
Gines Serrán Pagan.
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OPINIÓN
/
PERSONAL Y TRANSFERIBLE
