Los agentes de la Policía Local detuvieron en la madrugada
del sábado al domingo a un joven que conducía de forma
temeraria por las calles de la ciudad. A la una de la
madrugada, los agentes recibieron una llamada de la
centralita informando de que habían recibido varias quejas
comunicando que un individuo a bordo de un vehículo de la
marca Rover realizaba maniobras peligrosas para los demás
vehículos y para los peatones.
Los agentes localizaron al individuo, que se dirigía a la
barriada Juan Carlos I, a la altura de Regulares,
comprobando que el conductor realizaba maniobras temerarias,
tales como invadir el carril contrario, no respetar el paso
de los peatones y obligar a los vehículos a apartarse cada
vez que realizaba movimientos en zigzag con el vehículo.
Los agentes pusieron en funcionamiento las señales acústicas
y luminosas para hacer parar al vehículo, que no hizo caso
de las indicaciones. Una vez conseguida la detención del
turismo, la Policía le pide al conductor su documentación, a
lo que éste se niega profiriendo insultos y amenazas contra
los agentes.
Una vez fuera del vehículo, el individuo intenta arremeter
violentamente contra los funcionarios, teniendo que ser
reducido. Seguidamente le introducen en el vehículo
policial, informándole antes de los derechos
constitucionales que le asisten, así como los motivos de su
detención.
Resistencia
Como consecuencia de la resistencia ofrecida, el individuo
debe ser trasladado al ambulatorio José Lafont, donde una
vez asistido se le extiende el pertinente parte facultativo.
Una vez en las dependencias policiales, el detenido continúa
con los insultos, amenazas y muestras de agresividad hacia
los agentes, siendo reducido y de nuevo informado sobre los
derechos que le amparan.
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