Un escritor británico dijo una vez: “No se viaja para ir a
ninguna parte, sino para ir”. En la actualidad, Internet nos
abre una nueva dimensión para hacer realidad esta
apreciación. La cuestión es si Ceuta resulta un lugar
atractivo o inhóspito para el internauta. La Red está
plagada de información sobre todos los puntos del mundo y la
Ciudad Autónoma quiere posicionarse como un foco turístico.
Las webs hablan por sí solas.
Los datos básicos sobre la ciudad, su plano, localización de
sus puntos de información, hoteles y monumentos pueden
encontrarse en la página oficial, www.ceuta.es pero la
posesión de dos dominios desactualizados www.ciceuta.es y
www.turiceuta.es no da una buena imagen. La página más
completa en el ámbito local de la ciudad es
www.conoceceuta.com, que contiene información actualidad de
horarios de medios de transporte, restaurantes o hoteles,
entre otros contenidos.
El turismo rural ceutí poco a poco se está haciendo un hueco
en la oferta de ocio. Sin embargo, en Internet es un total
desconocido puesto que si buscamos en portales
especializados -los que tienen el mayor número de enlaces-
‘turismo rural en Ceuta’ se obtiene un resultado negativo.
Ocurre en www.casas-turismo-rural.com, www.ruraliberica.com,
www.casasruralesalacarta.com o en www.mispueblos. com, donde
Ceuta y Melilla son las únicas zonas donde el enlace da
error.
www.migueldeluque.com es la página del complejo rural que
existe junto al pantano del Renegado tiene una estupenda web,
que sin embargo, no tiene un buen sistema de enlaces. Esta
iniciativa queda aislada, con lo que sólo la visitan las
personas que ya conocen previamente el lugar o al menos, su
denominación.
El déficit de alojamientos orientados a los jóvenes en
Ceuta, como albergues y cámpings, se refleja claramente en
Internet. Sólo aparecen los hoteles de referencia y algunos
hostales de dos estrellas. Resulta difícil encontrar las
pensiones ceutíes. La creación de estas instalaciones
juveniles posibilitaría enlaces a la red europea de
albergues, páginas de información universitaria, como
www.becas.com, que en estos momentos, no tiene resultados de
búsqueda en alojamientos en Ceuta. En cambio, encontramos
dos anuncios de hace tres años de una chica que buscaba
alojamiento porque tenía que realizar unas oposiciones. Esto
no es un foco turístico.
Guías turísticas
El primer aspecto fallido, en esta ocasión tanto dentro como
fuera de la Red, es que Ceuta no posee una guía turística
propia en varios idiomas y bien enfocada y promocionada.
Marcas mundialmente reconocidas, como ‘Lonely planet’, hacen
referencia a Ceuta como ‘The Spanish Marroco’ y siempre como
lugar de paso para atravesar el Estrecho de camino al país
vecino, mucho más en auge. Las guías nacionales en la Red
tienen escasos datos sobre Ceuta, los más básicos sobre el
clima, la ubicación, la historia, la gastronomía y las
fiestas.
Las dos páginas webs con contenidos más actuales y dinámicos
son www.ceutacomercial.comy www.ceutafacil.com. Estas
direcciones contienen la información del lugar tanto teórica
como práctica, con galerias de fotos e incluso con un
reportaje audiovisual que se emitió en TVE sobre Ceuta. En
la otra cara de la moneda, se observa la carencia de
universalidad de la ciudad. Wikipedia no contiene ningún
artículo en el que figure Ceuta, para www.red2000.com las
Ciudades Autónomas ni siquiera existen y el directorio de
www.excite.es tiene el 50 por ciento de los enlaces de Ceuta
deshabilitados o poco enfocados a la actividad turística,
incluso tratándose de las playas de Ceuta con un enlace al
Ministerio de Medio Ambiente.
www.sol.com o www.tuguiade. com, que son direcciones
claramente enfocadas hacia el mercado turístico
internacional, poseen datos genéricos de Ceuta así como
enlaces a las páginas locales oficiales. Esta combinación es
la fórmula más habitual, de lo general a lo particular. El
turista se interesa por un lugar y cuando quiere visitarlo,
se informa más profundamente en los organismos oficiales más
directos.
Ceuta no es una total desaparecida pero tiene un gran camino
por andar si no quiere quedarse como lugar que no va a
ninguna parte.
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