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OPINIÓN - LUNES, 21 DE AGOSTO DE 2006

 
OPINIÓN / CARTAS AL DIRECTOR

Aristóteles (Obra escultórica de Ginés Serrán)

Por Domingo Ramos

Limadas las divergencias que han mantenido el autor, Ginés Serran, sobre la escultura en bronce del cartógrafo Al-Idrissi que se va a erigir en nuestra ciudad y el portavoz de la Asociación “Luna Blanca” Mustafa Abdelkader (ya hemos dicho que Ginés es el máximo exponente de la filantropía por su respeto y amor a sus semejantes, de una parte y, por otra, añadimos, que siendo natural de Ceuta y conocedor de los usos, costumbres y religión de nuestros conciudadanos musulmanes, jamás entraría en falta de respeto hacia sus temas sagrados cuestión que, por lo que se ve, así ha sido admitida por el representante de la humanitaria entidad lo que ha supuesto la conclusión de la controversia) hoy vamos a ocuparnos de otro insigne filósofo griego: Aristóteles, nacido en Estagira (384 a.C.), por lo que fue llamado el “Estigirita”, hijo de un médico. A los dieciocho años marchó a Atenas donde por espacio de veinte años siguió en la famosa Academia lecciones de Platón del que fue discípulo predilecto, llevando a cabo, una vez fallecido el maestro (348), un viaje por Asia menor relacionándose con Filipo, rey de Macedonia, que le encargó la educación de su hijo, el futuro Alejandro Magno.

Aristóteles compendió todo el saber de su época, pero brillo especialmente en las ciencias naturales descriptivas. Fue el primero en hacer una clasificación de las ciencias que dividió en Teóricas (matemáticas, física y metafísica), Prácticas (ética, política y economía) y Poéticas (poesía, retórica, etc.), no incluyendo en esta clasificación la Lógica, “pues viene a ser el instrumento para el recto discurrir de todas”, siendo la Lógica y la Metafísica descubiertas por él.

A pesar del reconocido magisterio de Platón, corrigió en aspectos fundamentales las teorías del maestro, afirmando, como él, que “la esencia de todas las cosas es lo universal y necesario, entendiendo que solo pueden estudiarse en el mundo de lo singular y concreto”.Siempre conservó Aristóteles la influencia de su maestro Platón pero en su madurez superó el platonismo hasta configurar su propio sistema de pensamiento que se separa del de Platón en un punto fundamental: Aristóteles no acepta que “las ideas sean entidades subsistentes en un mundo separado de la realidad sensible, siendo para él las ideas la esencia de las cosas, que se halla en las cosas mismas”, cuya constitución explica mediante los conceptos de potencia y acto, materia y forma o la teoría de las cuatro causas: material, formal., eficiente y final.

Con la temprana muerte de Alejandro El Magno y final de su reinado, Aristóteles, protegido suyo, tuvo que hacer frente al sentimiento antimacedonio que estalló en Atenas, siendo acusado de ateísmo por lo que se exilió y refugió en Calcis, Eubea, donde murió al año siguiente, a los 62 años de edad.

Se conservan unas 50 obras y tratados de Aristóteles y algunos fragmentos, distinguiéndose estos cuatro grupos: Escritos de Lógica, de Filosofía de la Naturaleza, de Filosofía Práctica y escritos de Poesía.
 

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