|
La Ciudad anunciaba ayer la
elaboración de un plan de inversión anexo a los presupuestos
con el objetivo principal de paliar la pérdida de fondos
europeos a partir de 2007. De 130 millones de euros se pasa
a sólo 66, fruto de la entrada de nuevos países en la Unión
Europea con rentas per cápita inferiores, por lo que serán
ellos quienes se conviertan en Objetivo 1 en detrimento de
regiones españolas como Ceuta, Murcia o Asturias que pasan a
una situación intermedia. El Gobierno de la Ciudad Autónoma
de Ceuta se ha quejado largo y tendido sobre esta reducción
de las partidas de la UE que, en el fondo responde, a
directrices de una nueva superestructura, la europea, que
soportamos (para bien en muchos casos) sobre nuestras
cabezas. Es duro recibir menos pero también es mejor
prevenir que curar. De esta manera, y metidos ya en faena,
el plan de inversión -la novedad para los próximos
presupuestos de la Ciudad Autónoma- tratará de que este
descenso porcentual sea más liviano. menos significativo. Si
algo ha de caracterizar a los gestores de las arcas públicas
es la capacidad de anteponerse a las situaciones adversas; y
si son económicas ni te cuento. Sabiendo con antelación que
se pierde dinero y capacidad de gestión no sirve de nada
continuar con las lamentaciones y lo único que cuenta es la
iniciativa y, si se quiere, la creatividad, la estrategia
con los números para que cuadren y para continuar con los
planes sociales, muy necesarios en Ceuta, a pesar de tener
menos pasta que manejar.
El plan de inversión previsto por la Ciudad Autónoma debe
ser efectivo en todo caso y, salvo incidencias de última
hora, debe servir para que el ciudadano no note el
vertiginoso descenso en los presupuestos. Un ciudadano que
ya conoce la coyuntura o que la intuye con solo abrir los
periódicos o encender la radio por lo que sabe que la Unión
Europea es más grande y hay territorios con necesidades más
acuciantes.
|
OPINIÓN / EDITORIAL
