Mis cosas
 

ADE
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Hoy viernes, día 4 de agosto, tendrá lugar en la puerta de la Iglesia de África, Santuario de Nuestra Patrona, la tradicional ofrenda de flores.

Vamos, digo yo, que hoy es viernes día 4 de agosto porque, con esto de bajar al recinto ferial a ver y enterarme de cosas, he perdido la noción del tiempo y no sé si, hoy, es viernes o martes santo.

No hagan elucubraciones, que el asunto ese de no saber qué día es hoy, no es debido a nada relacionado con lo etilíco, sino a la falta de sueño con lo que, últimamente, me gusta dormir.

Y quiero que conste en acta que duermo soñando con los angelitos. Cada quisqui sueña con lo que es y servidor, está feo decirlo, es un angelito bajado del cielo.

Pintor de santos de alcoba// de tantos pintores buenos // pinta un ángel periodista // al angelito Andrés // porque ellos también van al cielo.¡Toma del frasco, Carrasco!

.Para que se enteren, de una vez, todos aquellos que me han castigado con todas las penas del infierno. Además, son tontos con balcón a la calle que diría mi amigo, Manolo de la Torre, porque me he enterado, bien enterado, que el infierno no existe.

Bueno como ya saben, ustedes usease vusotros, que no voy a ir al infierno sino al cielo, para cabreo de todos los analfabetos, pelotas y lameculos, pues me lo estoy pasando bomba en estas fiestas patronales.

Como les decía, antes de cambiarle la letra de una de sus mejores canciones a mi admirado Antonio Machín, hoy se celebra la tradicional ofrenda floral a nuestra Patrona la Virgen de África.Y para que se me cabreen más, todos esos que tanto me quieren, el menda fue participe de la puesta en marcha de la ofrenda floral, a la Virgen de África.

No es por nada, pero hay que ver la de cosas que he hecho a lo largo de mi vida.Y, después, hay tontos, analfabetos e ignorantes, a los que la tómbola de la vida, les regaló la gorra y el pito con mando, politiquillo de medio pelo, que en una cena, hace tiempo, cuando me dieron una placa en reconocimiento a mi trabajo en los carnavales, se permitió el lujo de preguntar, cuál era el mérito que tenía para recibirla. El pobre no es más tonto, porque le falta par de días de entrenamiento.

El día que se me ocurra preguntar cuáles son los méritos que posee para tener la gorra y el pito, no me va a hacer falta que nadie me dé explicación alguna, te los voy a decir yo solito, sin más ayuda que mis conocimientos sobre tu persona.

De momento, te voy a explicar las razones por las cuáles fui uno de los que participaron en la creación de la ofrenda floral a nuestra Patrona.

El alma mater del evento, fue mi gran amigo, al que le tengo ley de la de verdad, de la buena, sin trampa ni cartón, José Ángel Guerrero Alcantara que era presidente, en aquellos momentos de los Infantes de Santa María de África.Y servidor, lo que son las cosas, era el secretario del asunto.

Mi gran amigo, Ángel ,al que creo, con toda la sinceridad del alma que, en esta tierra, no se le ha hecho justicia, hizo la propuesta y toda la directiva le apoyamos.

Dicho y hecho porque si algo tiene, Ángel, es el no dejar para mañana lo que puedas hacer hoy. Así que, a los pocos meses de madurar la idea, tuvo lugar la primera ofrenda floral en honor de nuestra patrona la Santísima Virgen de África.

Jamás nos hubiésemos imaginado el enorme éxito que tuvo aquella idea.Toda Ceuta, niños, jóvenes y mayores, acudieron a la entrada de la Iglesia de África a depositar las flores ante la Patrona de Ceuta.

Tuvimos que trabajar muy duro para ir colocando tantos y tantos ramos de flores que portaban los ceutíes en esa ofrenda floral, la primera que se hacía en nuestra tierra.

Tengo que decir y digo, porque es de justicia reconocerlo, que nos vimos desbordados ante la masiva afluencia de ceutíes que querían depositar, sus ramos de flores, ante la Patrona de Ceuta.

Hoy, al recordar aquéllos tiempos, he sentido una gran emoción que, además, me ha dado pie a rendirle un pequeño homenaje, a un gran amigo, Ángel Guerrero Alcantara, creador de la ofrenda floral a la Patrona de Ceuta.

Iré, como cada año, a ver esa tradicional ofrenda floral que se sigue manteniendo a través de los años. Y, como cada año, sentiré en el interior de mi alma el orgullo, como ceutí, de haber sido uno de los partícipes de ponerla en marcha.

Lo que son las cosas, criaturitas mías, una vez más, y no sé cuantas van, el menda y el tío de las almendras, ha sido uno de los participes de esta tradición ceutí.

Y es que me pasan cada cosa, en la vida, y he hecho tantas por mi tierra, sin pedir nada a cambio, que cuando veo a esos personajillos de medio pelo, politíquillos del tres al cuarto, pelotas y lameculos, me da la risa escucharlos hablar contando, una y otra vez, a quienes quieren creerselo, cada vez menos, las de cosas que han hecho y las que van a hacer por esta tierra.

Que cachondeo, tú.