A las nueve y media de la mañana comienza la segunda sesión
del juicio que se sigue por el asesinato del ‘Kimbi’. Los
primeros testigos declararán ante los tres magistrados que
componen el tribunal de la sección sexta de la Audiencia
Provincial de Cádiz en Ceuta tras la primera sesión,
celebrada el pasado miércoles, en la que testificaron los
catorce acusados.
Una vez escuchados los testimonios de las presuntos
implicados, llega el momento de que tanto los abogados
defensores como el representante de la acusación particular
y la Fiscalía presenten a los testigos que pueden ayudar a
esclarecer lo sucedido en la Nochevieja de 1999 en la
barriada del Príncipe. Más de un centenar de personas, entre
testigos (53) y pruebas periciales (52), prestarán
declaración en este juicio que se prolongará hasta el mes de
junio.
El fiscal pide unas penas para los acusados que van desde
los 4 hasta los 44 años sumando un total de 432 años de
cárcel. Además, el ministerio público solicita para los
catorce implicados una pena de inhabilitación especial para
ejercer su derecho al sufragio pasivo durante el tiempo que
dure la condena, la prohibición de residir o entrar en Ceuta
durante cinco años, el abono de las costas procesales y una
indemnización de 125.000 euros para la hermana del ‘Kimbi’ y
otra de 40.000 euros para A.A.D., el copiloto del ‘Kimbi’ el
día de la emboscada y que logró huir del lugar de los hechos
a pesar de resultar herido en ambas piernas.
Declaración de los acusados
En la primera jornada del juicio, en la que declararon las
catorce personas que se sientan en el banquillo de los
acusados, la mayor parte de los testimonios hicieron alusión
a dos miembros de la Policía, M.A. y J.L.P., que,
presuntamente, habrían intentado conseguir una declaración
acusatoria contra A.A.A. ofreciéndoles a cambio la libertad.
De igual modo, todos los acusados negaron al fiscal que
perteneciesen a ningún tipo de banda o que, alguna vez,
hubiesen tenido algún enfrentamiento con el fallecido.
En lo que se refiere a las coartadas presentadas por los
acusados acerca de dónde estuvieron el día que se produjo el
asesinato, seis de ellos dijeron estar en casa o pasando el
día con sus familias, otros dos estuvieron en la ciudad
santa de La Meca, uno más trabajando, dos de los acusados
dijeron estar fuera de Ceuta, en Madrid y Marruecos, dos más
relataron que fueron testigos de un accidente de tráfico en
la barriada de Hadu y sólo uno dijo no recordar nada de lo
que hizo aquel día porque “estaba enganchado a la droga”.
El testimonio ofrecido por este último fue muy
contradictorio ya que fue el único que no se ratificó en sus
anteriores declaraciones en las que acusaba a algunos de sus
compañeros de banquillo y, además, dijo haber sido objeto de
continuas manipulaciones tanto en sus declaraciones
policiales como en las judiciales: “a mí me dieron un papel
en blanco para que firmara y no sé más, sólo que estoy en la
cárcel por ello”.
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