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Para ser esta la primera legislatura en la que desempeña
cargo de diputado en la Asamblea, siendo su candidatura la
más votada, aun con mucha diferencia, después de la del
Partido Popular, Mohamed Mohamed Ali, líder de la Unión
Demócrata Ceutí ha conformado una seria oposición con
ponderadas y meditadas actuaciones, en la mayoría de las
veces dirigidas, eso sí, en pro de la etnia musulmana, a la
que en absoluto ha desencantado Ha demostrado asimismo, su
capacidad para la importante misión que su colectivo
electoral le ha confiado con multitud de actuaciones
destacando como mas notable, a nuestro entender, por la
trascendencia que ello pueda tener para el devenir de esta
Ciudad, la referida a la redacción del nuevo Estatuto que se
proyecta someter a criterio y aprobación del Gobierno de la
Nación.
Mohamed Ali, como consecuencia de sus actuaciones en la
Asamblea, se ha ganado, creemos, el puesto de líder de la
población de origen musulmán a que hemos hecho referencia y
de seguro que alcanzará cotas mas elevadas de confianza por
parte del censo en el próximo proceso electoral del mes de
mayo del venidero año. Y más si, como se viene especulando,
forma una coalición de partidos, para lo que viene
realizando las oportunas tomas de contacto, a fin de aunar
fuerzas y, consiguientemente, incrementar el voto hacia esta
coalición, que es lógico que también lidere, en la que
sobresale por su preparación, su ya, aunque todavía corta,
experiencia y el conocimiento de sus actividades y
actuaciones en el orden político que los electores de seguro
han venido percibiendo.
Es lógico, por otro lado, el interés de Mohamed Ali y de su
Partido, de que en el próximo Estatuto de la Ciudad se
proceda a la inclusión dentro del texto del mismo, de la
lengua árabe, porque no cabe duda que es una manifestación
de la realidad local. Pero, aparte de que no es una lengua
española que se encuentre reconocida en el ámbito nacional,
cabría, también, preguntarse: ¿cual es el idioma árabe que
Mohamed Ali quiere que se incluya en el Estatuto: el
coloquial, la lengua oral, el tamazight, el árabe clásico,
el dialectal o unos de los muchos dialectos bereberes que
utilizan la mitad de los ciudadanos marroquíes, tanto en el
medio rural como urbano y que, al parecer, es el que mas se
emplea en Ceuta por los musulmanes?. Y caso de ser éste
último idioma ¿qué gramática habría que seguir para su uso
oficial?, pues que sepamos, este importante idioma carece de
normas lingüísticas que estudien sus elementos y
combinaciones.
Y normal, por último, que Mohamed Alí continúe con su
confrontación que no enfrentamiento con el partido Popular
que será, según todos los indicios, el próximo ganador de
los comicios y que su actuación venga dada en pro de todo el
pueblo ceutí, no exclusivamente hacia un solo colectivo.
Aquí podríamos añadir la reflexión que hacíamos a Mustafa
Mizzian, posible candidato del Partido Democrático y Social
de Ceuta, que lo ideal, aunque suene a utopía, será que en
su lista electoral se integren, aparte de los candidatos de
religión musulmana, otros ceutíes de origen cristiano,
israelita o hindú. Y aprovechando esta sugerencia que nos
hemos permitido exponer, mostrar a Mohamed Alí el
reconocimiento a su interés por incluir en la candidatura
del partido a un importante censo de mujeres que, de seguro,
darán un estupendo juego en los avatares y vicisitudes
políticas que se avecinan en la próxima legislatura
municipal, en nuestro caso, de la Asamblea de la Ciudad
Autónoma de Ceuta.
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OPINIÓN
/
PERSONAL Y TRANSFERIBLE
