La muerte del joven ceutí Mustafa Ahmed Mohamed, casado,
padre de tres hijos, vecino orgulloso del Príncipe,
activista comprometido socialmente, dinámico y trabajador...
a manos de un adolescente al que, momentos antes, le
reprochaba el robo de un teléfono móvil, ha causado gran
conmoción entre los vecinos de la barriada y entre sus
compañeros de Izquierda Unida-Ceuta. El entierro se
celebrará hoy definitivamente, después de que las pruebas
del forense se extendieran durante toda la tarde de ayer.
Al tanatorio municipal acudieron durante todo el día
familiares, colegas del partido en el que militaba y vecinos
del Príncipe, visiblemente afectados por el inesperado
fallecimiento de Mustafa Ahmed Mohamed, un hombre
“comprometido y a disposición de su barrio”, según repetían
una y otra vez conocidos y amigos del fallecido.
Reflexiones
En el seno de Izquierda Unida surgían ayer dos reflexiones
tras la muerte de Mustafa Ahmed Mohamed, que resultan de una
mezcla entre momento vivido, la situación urbana y vecinal,
y de las quejas que han recogido entre los habitantes de la
barriada, porque ante todo “nos fastidia el silencio, hay
que empezar a denunciar”.
La primera de las cuestiones gira en torno a la Ley del
Menor y a la supuesta impunidad legal que les presta la
normativa por no haber sobrepasado los 18 años. El entorno
político de Mustafa Ahmed Mohamed coincide con la valoración
vecinal. Ambos califican de “muy peligrosa” la presencia de
armas en la barriada; y más, en manos de menores. “El
Príncipe tiene miedo”, indica Mohamed Haddú Musa, líder de
IU en la ciudad, “a causa de grupos de ‘niñatos’ que tienen
atemorizada a la barriada”. Recientemente, el barrio sufría
un nuevo corte de luz de madrugada y la quema de parte de
los contenedores urbanos. IU indica que “el amparo de la Ley
del Menor” beneficia la consecución de estos actos
vandálicos, que, lejos de estar organizados, proceden, en
parte, del hastío que invade a los jóvenes del barrio. El
origen de las armas no está claro pero sí su amplia
presencia en la zona; una cuestión que denuncia el
presidente del Príncipe Laarbi Mohamed y los miembros de
Izquierda Unida respectivamente.
Seguridad
Por otro lado, la carencia de cuerpos y fuerzas de seguridad
en la barriada con mayor índice de delincuencia de la ciudad
es algo que llama poderosamente la atención tanto a vecinos
como a la ejecutiva de IU. “Debería haber un puesto fijo a
dónde acudir en caso de necesidad de auxilio y patrullas
permanentes, ya que es un derecho básico de los ciudadanos y
esta es una barriada compuesta por muchas familias y gente
de bien que paga sus impuestos como todos”, explica Karim
Mohamed. “Probablemente sea difícil realizar un plan
integral específico para el Príncipe y lleve tiempo su
implantación, pero es que ni siquiera se ha intentado. No
conocemos ninguna propuesta ni iniciativa; ni por parte de
la Delegación del Gobierno y de Jerónimo Nieto, que ya lleva
dos años aquí y debiera conocer un poco las singularidades
de Ceuta; ni por parte de la Ciudad, que vende una
convivencia intercultural inexistente; y ni siquiera
impulsada desde las formaciones políticas de la oposición”,
añade Mus.
Plan Integral
La segunda reflexión que planteaban ayer los dirigentes de
Izquierda Unida “es la necesidad imperiosa de un plan
integral para la barriada”, habitada por alrededor de 10.000
vecinos (a los que habría que añadir la población de
inmigrantes ‘sin papeles’ y que la formación política estima
en más de 5.000) “que pagan sus impuestos como cualquiera
pero que no reciben las mismas prestaciones y que ha crecido
de un modo anárquico y al margen de la ciudad que
supuestamente integran”. Ambos problemas están estrechamente
relacionados, pues la delincuencia en el menor es producto a
menudo de una falta de perspectivas e ilusiones ante una
grave carencia educacional y económica. Carencias que llevan
a jóvenes de 13 y 14 años a frecuentar los cafetines en
horario escolar llenando su tiempo entre partidas de parchís
y bocanadas de humo denso. Sin que esto sirva de atenuante
ante un crimen, la sensación en el Príncipe es la de que el
barrio se encuentra desprotegido y que a nadie le importa lo
que allí suceda siempre que el lodo no llegue hasta abajo.
“Hay una ciudad de Puertas del Campo para abajo y otra
diferente hacia arriba. Aquí las autoridades no suben para
nada; sólo algunas formaciones políticas en vísperas de
elecciones”, dice con desencanto Karim Mohamed, compañero
del fallecido Mustafa en las filas de Izquierda Unida.
Grupos vandálicos
La proliferación de grupos de menores en la barriada que
actúan sin orden ni respeto por unas leyes que
paradójicamente les protegen, que campan a sus anchas
actuando contra sus propios vecinos, sin que haya una
autoridad competente capaz de poner orden, deriva
puntualmente en acciones como la ocurrida el pasado sábado.
“La Ley del Menor les ampara, para también hay una ley del
silencio generalizada que les protege dentro de la propia
barriada producto del miedo”, apunta Musa, líder de IU. “Las
autoridades locales, Ciudad y Delegación del Gobierno, han
permitido que el Príncipe se convierta en un ‘ghetto’. Ante
esta dejadez prolifera la infravivienda y la construcción
ilegal, la economía sumergida y la droga suplen la falta de
trabajo, la llegada de inmigrantes ilegales y la mendicidad
es alarmante, el caos circulatorio no se corrige y tampoco
llegan servicios básicos como la limpieza, la seguridad o el
alcantarillado, por no hablar de centros de ocio,
bibliotecas, acceso a internet...”, continúa Mus. “Es un
problema político y social”, añade el líder de IU que pone
sobre la mesa la necesidad de impulsar actuaciones
coordinadas entre las autoridades y las fuerzas de seguridad
del Estado. Musa hace hincapié en la necesidad de “convocar
a los agentes sociales para arreglar la situación de la
barriada del Príncipe; si no, la cosa va a ir a peor, hay
que presentar opciones de futuro a los jóvenes, hay que
reforzar la seguridad, hay que hacer un plan de urbanismo, y
todo con urgencia”.
A pesar de que Izquierda Unida no quiere tomar el caso de
Mustafa Ahmed como punto de partida de todas sus
reivindicaciones, Mohamed Haddú Musa señala que no puede
evitar pensar que el fallecimiento de su compañero de
partido “tiene que significar algo más”. Laarbi Mohamed,
presidente de la barriada, se mostraba, al igual que el
resto de vecinos del Príncipe, consternado y dolido ante tan
inesperada pérdida y mostraba el apoyo de toda la barrida a
la familia del fallecido.
|
Un elemento “todoterreno” en el seno de Izquierda Unida
“Un todoterreno”. Los compañeros
de partido de Mustafa Ahmed Mohamed recuerdan su labor en
Izquierda Unida como la “de una persona totalmente
comprometida y a disposición del barrio en todo momento”.
Afiliado a IU desde 1997, Mustafa Ahmed también colaboraba
con la Asociación Príncipe Felipe y era miembro del
sindicato Comisiones Obreras. Un todoterreno que “repartía
panfletos”, colaboraba como miembro de seguridad en
manifestaciones, etcétera. “Luchaba por el cambio del
barrio”, explica Mohamed Haddú Musa, líder de IU en Ceuta,
“era sociable, era un gran compañero”.
Sus colegas de partido recuerdan que Mustafa estaba a la
espera de recibir una vivienda de protección oficial en la
barriada, y que esa fue una de las últimas conversaciones
que mantuvo con ellos. Empleado de la empresa municipal
Obimace, habitaba una pequeña vivienda en el Príncipe, que
compartía con su suegra. De ahí, sus deseos de
‘independencia’, explican los miembros de Izquierda Unida.
Su familia, que “está destrozada”, ha recibido el apoyo de
los vecinos de la barriada y de partido.
“Esperemos que este hombre sea el último que muera en estas
circunstancias”, expresaban los miembros de Izquierda Unida
que hoy acudirán al entierro de su compañero.
|