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En cuanto al tema Prieto, Calderé tuvo sus razonamientos,
más bien lógicos: “A Prieto le estoy metiendo en un
‘embolado’ que, en estos momentos, ni le va ni le viene”.
El técnico explicó lo del ‘embolado’: “Son partidos de mucha
responsabilidad, y además el calendario a querido que en
estos primeros partidos nos enfrentemos a equipo potentes y
al no tener a Molina en condiciones y a Bolou, con cuatro
quilos de más, que en esta semana ya ha estado convocado al
estar en su peso he tenido que convocar a Prieto. En la
parte positiva de esta circunstancia, es que el desarrollo
particular de este jugador irá en creschendo muy
rápidamente, pero los condicionantes no han sido los
mejores, ya que ojalá le hubiésemos podido alinear en otras
condiciones más favorables”.
Pero como reconocía Calderé: “El fútbol manda y este chico
tiene que crecer, pero dada la característica de este
partido, ante unos centrales del Cartagena que los conocemos
muy bien, experimentados, rápidos y muy fuertes, Bolou tenía
que demostrar algo, tenía que demostrar algo Boluo, viendo
que había adelgazado esos cuatro kilos y que esa adaptación
le está costando. Bueno, ha tenido cuarenta y cinco minutos,
y al menos podemos tener una referencia mayor en cuanto a
Bolou”.
Calderé reconocía que el francés había hecho ‘cositas’
interesantes y que había peleado y trabajado para el equipo,
pero que había que ser sinceros en la vida. El jugador lo
está intentando pero las características de los informes
venidos de Francia, no se ajustan a los que yo pedí en su
momento y cuidado que lo digo con el máximo respeto hacia el
jugador. Ha trabajado, ha luchado y ha estado en el partido,
pero no se le puede pedir más a un jugador joven y que
repito, las informaciones que recibió el club, no se
correspondían a las de el jugador”.
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FÚTBOL /
SEGUNDA DIVISIÓN 'B' GRUPO IV
