Aquí, en este fermoso país llamado
España le guste o ledeje de gustar al Pérez Carod y a todos
esos personajillos de poca monta que dudan de que esto sea
España, no hay cosa que más enfade a los políticos que
recibir criticas que cuestionen algunas de sus actuaciones.
Piensan o tienen la creencia que, por dedicarse al asunto de
la política, están por encima del bien y del mal y que toda
y cada una de sus actuaciones son perfectas.
No entienden o no les interesa entender que, cada día, están
sujetos al examen que como políticos deben pasar de cada una
de sus actuaciones.
Les cuesta un enorme trabajo comprender que cuando la
critica es constructivas deben hacer caso de ella y corregir
los errores que se pueden haber cometidos como humanos que
son.
Hace algún tiempo desde esta misma página en la que uno
emite, cada día, su opinión equivocada o no pero de mi
pecunio particular sin tener que “fusilar” noticias de otros
periódicos, dije que la llegada de todo ese “turísmo de
sombrerito” no aportaba económicamente nada a esta tierra,
sino todo lo contrario que hacíamos una inversión de la que
no íbamos a recoger beneficio alguno.
Hubo a quien no le sentó bien esa opinión porque creyó que
le estaba haciendo una critica injusta e inmerecida.
Es más le avisaron, los pelotas y lameculos de turno, que
todo se debía a una campaña que se me había mandado hacer
contra el viceconsejero de turismo. Nada más lejos de la
realidad.
Los que me conocen saben, perfectamente, que no permito a
nada ni a nadie que me dé ordenes alguna pora iniciar nada
contra nadie.
Todo lo que escribo, lo escribo sin recibir ordenes de
nadie, sino porque quiero, porque puedo y porque me da la
real gana ¿pasa algo?.
Pues bien, como aquí se dice todo, tengo que decir y digo.
que el viceconsejero de turismo con el que me une cierta
amistad, con un comportamiento caballeroso, siempre me
saludó atentamente y, jamás, me volvió la cara ni me quitó
la palabra.
No como otros políticos u lo quesean, que tampoco hay que
exagerar, que a la menor de las criticas, me volvieron la
cara y me dejaron de hablar.Cosa, por supuesto, que me llevó
a tal depresión que, desde aquellos momentos, dejé de comer
y de dormir.
El tiempo ha pasado, que es lo malo que tiene el tiempo que
siempre pasa y pone a cada cosa en su sitio, y me entero de
que el viceconsejero de Turismo, José Antonio Rodríguez, ha
decidido suprimir la oferta de transporte de l5 euros para
la llegada de turistas a nuestra tierra.
¿Por que ha tomado esa decisión el Viceconsejero de
Turismo?. Muy sencillo, y no es porque a uno le guste
apuntarse “tantos”. por el mismo motivo por el que
criticamos, desde esta página, aquella iniciativa en una
critica constructiva, a pesar de lo que le pudiesen contar
los pelotas y lameculos de turno.
El Gobierno de la Ciudad encargó un sondeo a la Cámara de
Comercio a cerca del resultado económico generado por esos
turistas del fin de semana que visitan nuestra tierra por la
oferta realizada por la Ciudad Autónoma.
El resultado de dicho sondeo es más que preocupante porque
eso miles de turistas que visitan nuestra tierra los fines
de semanas gracias a la oferta realizada por la Ciudad sólo
un l7,70% consumen productos en nuestra tierra.
A estas visitas de fines de semanas a nuestra tierra, la
Ciudad invertía la nada despreciable cantidad de veinte
millones de las antiguas pesetas.
Estos veinte millones, según el viceconsejero de Turismo
serán invertidos en otro tipo de turismo.
Son varias las opciones que José Antonio Rodríguez baraja.
Una de ellas podía ser una campaña de atracción a los
ciudadanos que realizar el servicio militar en Ceuta,
contactando con ellos por carta, ofreciéndoles la
oportunidad de visitar la ciudad a través de una oferta de
fin de semana.
La oferta incluiría una visita al cuartel donde cumplieron
su servicio militar y otra visita a diferentes lugares
significativos de la ciudad. Esta promoción de “turismo para
nostálgicos” se efectuaría comunidad por comunidad empezando
por Andalucía.
Me encantaría no haber acertado en lo que pronostiqué
quesería esa campaña turística pero, una vez más, la critica
constructiva realizada sobre la misma fue un acierto pleno.
Lo bueno que ha tenido, todo ello, es que al menos el
viceconsejero ha tratado por todos los medios dar a conocer
nuestra tierra. Otros siguen sin dar un palo al agua, que de
todo tiene que haber en la Viña del Señor.
A José Antonio Rodríguez le deseamos toda clase de éxito en
esa nueva campaña.
Al tiempo a ese que pone a cada cosa en su sitio, una vez
más, mi agradecimiento sincero, porque a pesar de lo que le
dijeron los pelotas y lameculos al viceconsejero, acerté de
pleno al decir que esa campaña no aportaría nada a nuestra
tierra, sólo gastos y más gastos.
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